A falta de pocos días para que el Salerm regrese a los entrenamientos, el técnico Juan Arsenal y el presidente, Francis Cabeza, trabajan para tratar de cerrar la plantilla con la que el equipo competirá en la Tercera División. Hasta el momento, el club ha renovado a la mayoría de los jugadores que lograron el ascenso, un total de 16 de los 25 que formaban parte de la plantilla 2016/17, lo que significa más del 60% del bloque estuvo a las órdenes de Juanmi Puentenueva.
Tras las ocho bajas (Enma, Sandro, Santaella, Oprica, Pedraza, Awana, Juanjo y César) y los tres fichajes (Ángel del Pino, Chechu Córdoba y Antonio Lucena), el interés está en saber quiénes serán los jugadores que completarán definitivamente el grupo. Por el momento, parece que las necesidades apuntan hacia un delantero, aunque dependiendo de la disponibilidad económica no se descartaría la llegada de otro jugador polivalente para adaptarse a las necesidades del equipo.
Además, otro de los obstáculos a los que tendrá que hacer frente el club es el relativo a las fichas sub-23, ya que la normativa de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) obliga a los clubes que militan en categorías nacionales a contar con al menos seis jugadores con edades inferiores a los 23 años, una circunstancia que en el caso del Salerm todavía no se ha cubierto, ya que los únicos sub-23 son Manu Tenllado, Salva Vegas, Christian Carracedo, Chechu Córdoba y Antonio Lucena.
Estando así las cosas, el club rastrea el mercado, sin querer precipitarse, pero siendo consciente de las dificultades existentes para fichar en una comarca donde no hay tantos jugadores de nivel para elegir. Todo apunta a que en unos días saldremos de dudas.