Ni rusos, ni americanos. Los chinos consiguen el primer aterrizaje exitoso en la cara oculta de la Luna. Aunque a decir verdad fue una sonda rusa, la Luna-3, quien la fotografió por primera vez en 1968. Por eso, lamayor parte de los nombres de esa cara son rusos.
Muchos de ustedes se preguntarán ¿Qué hacen los chinos en La Luna? ¿Por qué nadie ha llegado a aterriza antes en la cara oculta? Se olvidan que es una de las mayores potencias mundiales, que entre otras cosas tiene en sus manos gran parte de la deuda de muchos países, y que ha combinado el comunismo político con el capitalismo económico.¿Les recuerda a ustedes a alguien?
Pero además, no crean que nuestros amigos los chinos, van a poner una cadena de restaurantes en nuestro satélite, ni un grupo de tiendas que vende de todo y más barato, sino que van a taladrar a una profundidad de 100 metros para analizar la cara oculta de quien ha despertado tanta literatura en todos los idiomas, y continúa siendo icono de románticos y enamorados.
El logro de la Administración Nacional del Espacio de China (CNSA), ocurre al mismo tiempo que el Prior del Valle de los Caídos niega al Gobierno el acceso para exhumar a Franco., todo se desacelera y descubrimos nuevas formas de hacer política en las redes digitales.
A decir verdad, los tiempos han cambiado tanto, que nada es lo que era y si no entendemos el presente, mucho más incierto se nos presenta el futuro y al principio y el final, vemos cómo se cumple lo que Jesús le dijo a sus discípulos,“Los últimos serán los primeros”
Vivimos en una sociedad competitiva en la que lo importante es conseguir el éxito, al precio que sea. A veces perdiendo en el camino lo mejor de nosotros mismos y eso nos sitúa los primeros del ranking de quienes más tienen o aunque carezcan de casi todo lo importante.
Y como no vamos a hablar de ninguna casuística individual, si no esto se transformaría en interminable, vamos a centrarnos en nuestro país, España. Aunque la crisis que todavía no hemos pasado del todo haya provocado que se perdiesen 10 años de crecimiento y hayamos perdido comba, todavía nos mantenemos entre las quince mayores naciones del mundo.
Y estar entre los mejores del Planeta no nos debe hacer perder la sesera, ni ser el segundo lugar más visitado del mundo, ni mantener un buen sistema de Seguridad Social, a pesar de lo que se ha empeñado la derecha en recortarnos derechos.
Tampoco debemos presumir por ser líderes en despliegue de AVE y fibra óptica. Podemos presumir de tener una de las mejores redes de infraestructuras del mundo con 46 aeropuertos, 16.313 kilómetros de ferrocarril y más 116,000 kilómetros de carreteras que impulsan nuestra competitividad y miren ustedes que todavía nos quedan cosas por conseguir.
Por ejemplo, y para no pecar de triunfalistas, España, tenemos también tristes records. Entre ellos estamos a la cabeza de Europa en trabajadores pobres, a pesar de que nuestro Gobierno acaba de subir el Salario Mínimo Interprofesional a 900 euros mensuales y de haber subido los sueldos y las pensiones.
Los hogares que cuentan con al menos un trabajador, hay un 15% que está bajo el umbral de la pobreza, lo que nos da el dato más alto de la Unión Europea y muy lejos del 8% de la media de la OCDE. Estamos seguros que con el tiempo y si el Gobierno socialista de Pedro Sánchez logra aprobar el Presupuesto para 2019 y consolidar su Agenda Social, notaremos los efectos beneficiosos en el conjunto de la ciudadanía.