El Ayuntamiento de Marbella ha descartado finalmente como sede del nuevo Palacio de Justicia de esta ciudad el inmueble que fue embargado al cerebro del caso de corrupción Malaya, Juan Antonio Roca, y va a poner a disposición de la Junta de Andalucía otra parcela al norte de la ciudad.
La alcaldesa marbellí, Ángeles Muñoz, así lo ha asegurado este jueves durante la inauguración del XV Congreso de la Abogacía Malagueña, donde ha explicado a los periodistas que desde el pasado julio se ha trabajado en otras alternativas por los problemas que ofrecía el referido edificio.
Los nuevos terrenos que se van a ceder a la administración autonómica están junto a la carretera de Ojén y se trata de más de 38.000 metros cuadrados, más del doble de los que requiere la nueva sede judicial para Marbella.
La opción inicial se descartó por problemas urbanísticos y con la Demarcación de Carreteras, por su proximidad a la autovía A-7.
La regidora ha explicado que esta misma semana la Junta de Gobierno Local ha dado luz verde al abono de casi tres millones de euros derivado de una resolución judicial para recuperar la parcela, cuya cesión a la Junta se llevará al próximo pleno.
Al respecto, el vicepresidente de la Junta y consejero de Justicia, Juan Marín, ha destacado que se haya encontrado “una solución a un problema enquistado”.
Los técnicos ya han dado el visto bueno a estos terrenos, que reúnen las condiciones, y espera que el proyecto de ejecución del nuevo Palacio de Justicia esté listo para finales de 2020.
El convenio para entregar a la Junta el edificio que fue propiedad de Roca junto al Hospital Costa del Sol, donde estaba previsto unificar las actuales tres sedes judiciales, se firmó el pasado mes de diciembre de 2018.
