Autobuses en fila a las puertas del anfiteatro de la sala Theatre Momart, una hilera de socialistas y banderas rojas. Esa era la estampa en la tarde del martes en la Punta de San Felipe, lugar elegido por el PSOE para el mitin del presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez. Arropado por unas 1.300 personas y acompañado por la secretaria del PSOE-A, Susana Díaz, la presidenta de la Diputación Provincial, Irene García, y el secretario de la Agrupación Local de Cádiz, Fran González, Sánchez comenzaba a calentar así la precampaña electoral.
Fran González, como buen anfitriónm fue el encargado de inaugurar el acto. Y lo hizo con palabras de agradecimiento para el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaskapor su gestión con respecto a los disturbios catalanes. “Un digno cabeza de cartel”, apuntaba González. “Nos han dejado solos, y en esa soledad si mirando a la derecha la vemos deseosa de reavivar el conflicto, y si miramos a la izquierda están encantados de conocerse a ellos mismos pero no de aportar. Os pedimos redoblar los esfuerzos, lo merece este país”.
Tomó el relevo en la palabra Irene García, quien resaltó la presencia en el acto de toda la provincia. “Todo el PSOE de Cádiz está hoy aquí, de todos los rincones. No hay municipio que no esté representado hoy en esta sala”. La presidenta de la Diputación expresó la necesidad de un gobierno central socialista que apoye los proyectos para la provincia, “un gobierno que no arrincone, porque desafortunadamente hay un gobierno en Andalucía que nos arrincona y, además, lo hace con el apoyo de la ultraderecha”.
En tercer lugar llegó el turno para Susana Díaz,que inició su discurso recordando a las últimas víctimas de la violencia de género y aprovechando para críticar las políticas en esta materia que está desarrollando el nuevo gobierno de la Junta de Andalucía. Díaz se ha colocado definitivamente del lado de Pedro Sánchez, y lo demostró exponiendo su fiel apoyo y confianza en el dirigente socialista. “Se ha demostrado que en una situación difícil para el país, los socialistas responden de otra manera. Primero la ley, después el diálogo. Pedro lo está demostrando con creces, con una oposición que desgraciadamente está en el casticismo, que no está pensando en nuestro país. Una derecha de banderas y balcones, las colocan como nadie en los balcones, son los mejores en envolverse en ellas, se las ponen en la muñeca, pero a la hora de la verdad, la España a la que aman es la España de unos pocos”. Sus palabras finalizaron con un guiño a la Memoria Histórica agradeciendo a Sánchez la intervención en el Valle de los Caídos, porque “los 50.000 andaluces en las cunetas, sus familiares, empiezan hoy a tener reparación, justicia y verdad”.
Finalmente, llegó la hora de Sánchez que afirmó que el presidente de la Generalitat, Quim Torra, “vuelve a demostrar que no condena la violencia” al instar a abrir una comisión de investigación sobre los protocolos de actuación de los Mossos d'Esquadra en las protestas de Cataluña. El presidente ironizó con que Torra ande “llamándome todos los días” y ha vuelto a pedirle que, antes que a él, “haga una llamada” a condenar la violencia, defender la convivencia y a las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado. También le pedía que “antes que hablar” escuche “a la mitad de los catalanes que no quiere la independencia”.
Pedro Sánchez también se refirió a la propuesta de resolución pactada en el Parlament por JxCat, ERC y la CUP que rechaza la sentencia del ‘procés’ y aludía al derecho a la autodeterminación, un texto con el que el independentismo desafía al Tribunal Constitucional (TC), aunque está redactado en unos términos que buscan evitar su impugnación. “El independentismo ha decidido echar un pulso y provocar de nuevo al Tribunal Constitucional”, sentenciaba.
Después indicó que el independentismo “por experiencia sabe que las provocaciones en el mejor de los casos no sirven para nada y en el peor para provocar dolor al conjunto de la sociedad”. Sánchez también ha advertido que cualquier infracción de la legalidad va a encontrar “una respuesta firme y serena” del estado democrático. “Esa regla vale para todos, sea quien sea y viva donde viva”, añadía.
De otro lado, el dirigente socialista cree que “no es necesario” sembrar ahora “alarmismo” sobre la llegada de una recesión económica y aseguraba que, si llega, el PSOE tiene “equipo” para afrontarla, muy al contrario de lo que,en su opinión, les pasa a los demás partidos. “No es necesario un alarmismo innecesario, las cosas en el justo término”, apuntaba. En cualquier caso ha presumido de que el PSOE disponenen de “equipo” para afrontarla, con unas ministras como la de Economía, Nadia Calviño, y de Hacienda María Jesús Montero.”Los otros no sé. De Podemos no hablo, Ciudadanos no tiene a nadie y Casado tampoco, bueno sí a Rato, pero ese está en la cárcel", bromeó.
Tras recordar que otros, en alusión al PP, “utilizaron la crisis” para “recortar, subir impuestos a las clases medias, y de paso corromperse”, Sánchez afirmó que el PSOE hará “todo lo contrario”: defender “el patrimonio común que es el estado de bienestar” y “si hay que subir los impuestos se les sube a los ricos”.
En cuanto a Cádiz, afirmaba que en cuanto tenga gobierno “van a estar escritas negro sobre blanco” inversiones para la provincia como un plan de empleo, un Plan Integral para el Campo de Gibraltar o inversiones en infraestructuras y para el sector naval. Criticó que “la derecha tumbara” los Presupuestos Generales del Estado (PGE) presentados por su Gobierno, porque llevaba, entre otras cuestiones, “mejoras en la conexión Algeciras-Bobadilla, tan importante no solo para la provincia sino para España”. El candidato del PSOE y presidente en funciones recordaba este martes que su Gobierno ha puesto en marcha un plan integral para el Campo de Gibraltar, “no sólo vinculado con la seguridad, que es muy importante sin duda, sino con la creación de oportunidades en el Campo de Gibraltar”.
Sánchez también hizo referencia al Brexit, recordando que han aprobado un plan de contingencia. Asimismo, tras desear que finalmente no haya un Brexit duro, aseguró que si es así va a hacer “todo lo posible para que no se trastoque la cotidianidad del día a día de los que cada día tienen que cruzar la verja para trabajar”.
Sánchez apuntó que se siente “en deuda” con los que votaron al PSOE en las últimas elecciones generales e “incluso con los que votaron a otras opciones progresistas”. Y reivindicó “una españa movilizada” que en los próximos comicios concentre su voto en el “único partido que puede vencer al bloqueo”. También se mostró crítico con el “trampantojo” que el líder de Podemos, Pablo Iglesias, difunde antes de las elecciones para advertir de que el PSOE se apoyará en Ciudadanos y PP: “Alto y claro” le ha asegurado a Podemos que el PSOE no tiene “nada que ver con partidos que pactan con la ultraderecha” en comunidades autónomas como las de Andalucía o Castilla y León.
