La Audiencia Provincial de Almería acoge esta semana la vista oral contra un agente de la Guardia Civil acusado de un delito continuado de falsedad en documento público después de que interpusiera varias denuncias de tráfico supuestamente ficticias contra un vecino con el que tenía una "enemistad manifiesta".
Según consta el escrito provisional del Ministerio Fiscal, consultado por Europa Press, el agente habría incoado "deliberadamente" dos expedientes de tráfico contra su vecino el 11 de marzo de 2017 supuestamente por no respetar las señales de los agentes de la autoridad y por circular sin haber pasado la ITV.
El agentes se enfrenta a una pena de seis años de cárcel como presunto autor de un delito de falsedad en documento oficial en un juicio señalado para el día 5 ante el tribunal de la Sección Tercera.
La fiscal señala que dichas actas de infracción tenían como hora de la denuncia las 22,13 y las 22,15 horas en el kilómetro 12,8 de la N-344 que conecta la capital con el Aeropuerto de Almería, si bien destaca que el acusado, junto con un compañero, patrullaba con un vehículo oficial por el kilómetro 1.500 de la carretera AL-3300 --ubicado en El Ejido-- a las 22,30 horas cuando fueron requeridos para que acudieran a un accidente.
Asimismo, apunta que fue el acusado quien en ambos casos "rellenó los dos expedientes" pese a que el hecho recogido en uno de ellos fuera denunciado por su compañero, quien "confió en todo momento en lo que el acusado había reflejado en ambas denuncias".
Con ello, el Ministerio Público entiende que el agente redactó las multas "faltando a la verdad" sobre el lugar, el momento y los propios hechos ya que "a la hora expuesta en ambos expedientes el acusado circulaba con el vehículo oficial en dirección al lugar del accidente a donde fueron requeridos, no habiendo estado esa noche en el lugar señalado en el expediente".
Del mismo modo, da cuenta de un segundo capítulo ocurrido el 7 de abril en el que el acusado se habría dirigido con el coche oficial entre las 4,30 y las 5,00 horas de la madrugada a las proximidades de la vivienda de su vecino de tal modo que, cuando este cogió su vehículo para irse a trabajar, "fue seguido por el agente que le dio el alto".
En esta ocasión, emitió de nuevo dos denuncias a las 5,17 horas por no haber pasado la ITV y por no llevar el cinturón de seguridad, si bien la fiscal sostiene que el guardia civil actuó de manera "deliberada" e "incorrecta" ya que, pese a que anotara que los hechos habían ocurrido en la Autovía del Aeropuerto, estos se "produjeron en la Avenida de los Juegos del Mediterráneo", lugar cuya competencia corresponde a la Policía Local.
Además de la pena privativa de libertad, la Fiscalía interesa para el agente otros seis años de inhabilitación y una multa de 12 euros diarios a razón de 24 meses.