Igualmente, ha iniciado conversaciones con el resto de propietarios para cerrar también acuerdos para comprar o permitir la ocupación del suelo por las aguas.
El alcalde, José María Román, que está manteniendo personalmente estas reuniones, ha manifestado la excelente predisposición de los propietarios y ha recordado que el permiso de éstos para el uso de los suelos es necesario para la ejecución del proyecto, que ya cuenta con el respaldo de la Agencia Andaluza del Agua, como expresó ante los representantes de los agentes económicos y sociales el director de Obras Hidráulicas del organismo, Juan Luis Ramírez Vacas.
Hace un mes, Ramírez esbozó en Chiclana las características técnicas de una obra de ingeniería que tendrá una longitud de 1.706 metros y un plazo máximo de ejecución de 24 meses. Se tratará de una presa que dispondrá de una salida de agua de dos por dos metros.
Plazos
El director general habló de que el siguiente paso era la evaluación de impacto ambiental, un proceso que pudiera estar acabado a mediados del próximo año, y que se llevará de forma paralela a la adquisición de los terrenos, en lo que ya trabaja el Ayuntamiento. Una vez superado este trámite, el proyecto pasaría al proceso de adjudicación, que podría estar resuelto a final de 2010, cuando se iniciarían las obras. Ramírez señaló que en las partidas del próximo año ya habrá recursos para la construcción, un dinero que aumentará considerablemente en 2011, cuando se incremente el tiempo de obras, dado que el próximo año sólo habrá trabajos durante un periodo corto de tiempo. Si se cumplen los plazos, a final de 2012 o principios de 2013 la obra estará concluida.
El alcalde agradeció el trabajo realizado por la Agencia Andaluza, así como por la Junta de Andalucía, que en los últimos años ha desarrollado numerosos trabajos para acabar con los riesgos que reportaban las avenidas del Iro.
La puesta en marcha de este proyecto, además, resulta muy importante para la construcción de vivienda protegida en la localidad, puesto que cientos de ellas se levantarán en el entorno del Iro, para lo que es indispensable que haya desaparecido el riesgo de riadas.
