El alcalde, Marino Aguilera, y le portavoz municipal, Ángel Montoro, han presentado este viernes los resultados de la auditoría del Ayuntamiento y de las empresas municipales Adalsa y Jardines y Medio Ambiente, llevada a cabo por la empresa Grupo de Auditores Públicos (GAP). Dicha auditoría, según ha recordado el primer edil, forma parte del pacto de gobierno suscrito entre Partido Popular y Ciudadanos, ya que constaba en el programa electoral de ambas formaciones. La contratación, con expediente iniciado en noviembre de 2019, se ha hecho mediante un procedimiento de licitación en el que resultó adjudicataria la empresa GAP. El desarrollo de la auditoría se ha visto demorado e incluso paralizado por el Estado de Alarma que se registró el pasado año, entre otras cosas, porque ha dependido de la presencia física de los responsables de las distintas áreas municipales. Se han auditado, según ha indicado Aguilera, tres aspectos: el grado de cumplimiento de la legalidad en materia de contratación; personal, retribuciones y contrataciones, y finalmente, todo aquello relacionado con la transparencia, las tecnologías de la información y comunicación.
Ángel Montoro ha indicado que los ejercicios sometidos a auditoría son los correspondientes a los años 2015, 2016, 2017 y 2018. Como principal rasgo se ha destacado “la dependencia que se ha tenido durante esos años de los contratos menores. La situación que nos hemos encontrado es que, al contrario de lo que marca la ley, podemos decir que, entre el 70 y el 80% de los contratos que tiene suscritos este Ayuntamiento, se han hecho a través de fórmulas de contrato menor, cuando la ley establece que el contrato menor debe tener un carácter residual, por ejemplo, por motivo de urgencia se deba realizar. Nuestro objetivo es ir reduciendo estos contratos menores, pero muchos de estos contratos están todavía vinculados, algo que nos ata”.
Por otro lado, Montoro ha destacado que “desde el año 2015 hay una serie de contratos menores que se han fraccionado de modo irregular. La ley establece una serie de máximos para realizar un contrato menor y no se puede llevar a cabo una serie de contratos menores a un proveedor que, en suma, superen ese nivel máximo establecido. Nos hemos encontrado que esta era una práctica habitual en el Ayuntamiento, obviando el procedimiento de licitación correcto. Así, en 2015 hay contratos por valor de 2,2 millones de euros que presentan una serie de irregularidades. Esa misma práctica se repite en el año 2016 por cuantía total cercana a los 4 millones; en el año 2017, la cuantía se eleva a 1,9 millones y en 2018 es de 1,6 millones de euros”.
La auditoría también ha analizado otros contratos mayores que se han llevado a cabo mediante concurso abierto, por número total de trece. Por ejemplo: dos naves industriales en el polígono Llano Mazuelos, el alumbrado extraordinario de feria, o la adquisición de un camión contra incendios en 2015; el pliego de contratación del Centro Municipal de Deporte y Salud y servicios deportivos, uno de los contratos más voluminosos que tiene el Ayuntamiento; el mobiliario del edificio de la Trinidad; la climatización del Edificio Joven; la adquisición de materiales para obras del PER, contratos de Etnosur, o contratos relacionados con obras en el cementerio municipal Nuestra Señora de las Mercedes. “Sobre estos contratos llama la atención la falta de procedimiento e incluso de formación, que denota, según señala la auditoría, que no existen los protocolos adecuados ni existe una normativa que indique los pasos a seguir en este Ayuntamiento para realizar correctamente un expediente. Este aspecto ya se ha corregido en buena medida con la implantación en 2020 de una herramienta de digitalización llamada Gestiona, y que es la que marca los pasos a seguir cada vez que se elabora un expediente. Por citar algún expediente, por ejemplo el de Etnosur de 2018 presenta como carencias a nivel de contratación el hecho de que no conste la memoria de necesidades, no consta orden de inicio que motive la necesidad del contrato, no consta el pliego de prescripciones técnicas, etc.”. “Algo que nos llama la atención es que haya expedientes donde falta documentación, y de hecho se han hecho varios requerimientos solicitando documentos que no se han aportado porque entendemos que han desaparecido. También destaca la carencia de seguimiento de contratos. Hay contratos en los que no se sabe si el adjudicatario está realizando las mejoras, no se sabe el volumen de horas que está realizando o repercutiendo a este Ayuntamiento, y es algo que estamos solucionando desde que entramos al Gobierno sobre todo llevando a cabo el control sobre esos contratos, especialmente sobre los más voluminosos. Estas carencias se vienen repitiendo en todos los contratos grandes. Se suele ir bastante rápido, con los plazos muy justos, algo que denotaba una falta de personal en el área de contratación muy grave. Actualmente estamos consiguiendo que esta área trabaje de una forma más ágil y más rápida”, ha señalado el alcalde.
Otra de las carencias que señala la auditoría se refiere a la política de prevención de riesgos laborales. También es notable la falta de formación en temas como la protección de datos, lo cual estamos solventando con un plan de formación, para que el personal de este Ayuntamiento realice con mayor garantía y seguridad los diferentes trámites de los procedimientos administrativos. Igualmente, en tecnologías de la comunicación, información y transparencia, se han puesto de manifiesto las carencias a nivel de software informática y seguridad y de hecho, en los primeros meses de legislatura, era raro el día en que no había un ataque informático o nos bloqueaban las cuentas, y es algo para lo que, en los presupuestos del año pasado ya se dotaron más de 80.000 euros y este año también va una importante cantidad para ir mejorando en estas cuestiones”, ha destaco el primer edil.
En la rueda de prensa se ha manifestado, igualmente, la disposición a dar continuidad a las auditorías que analicen la propia gestión del actual equipo de gobierno, un procedimiento que, según ha señalado el portavoz Ángel Montoro, tienen como objetivo marcar una hoja de ruta que lleve a mejorar en lo posible la gestión municipal.