El juez de Menores de Almería ha citado a declarar el 9 de mayo a otros tres adolescentes ante los indicios que apuntan a que pudieron encubrir el asesinato del joven marroquí de 18 años Nasr M.O.C, cuyo cuerpo sin vida apareció semienterrado en una playa de Almerimar, en El Ejido, y por el que permanecen internados desde febrero, en un centro de régimen cerrado, dos chicos de 14 y 16 años como presuntos autores de apuñalamiento mortal.
Según han informado a Europa Press fuentes jurídicas, la citación llega después de un informe policial haya identificado a los propietarios de los perfiles de la red social 'Tuenti' y de los teléfonos móviles a través de los que se habrían tenido conversaciones que apuntan a que estaban al tanto del crimen y no lo pusieron en conocimiento de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad pese a que la víctima desapareció en noviembre de 2012 y su cadáver fue hallado un mes después. Los arrestos no se produjeron hasta febrero de este año.
El juez de Menores decretó para los dos menores de 14 y 16 años que admitieron el crimen ser los autores del crimen ante la Fiscalía internamiento en régimen cerrado mientras que para los otros cuatro menores, entre ellos dos chicas, a los que se detuvo como presuntos encubridores, dictó libertad vigilada.
La citación de estos tres nuevos adolescentes deriva de la admisión por parte de la Fiscalía de diligencia solicitada por el abogado de la familia del joven marroquí. Los dos menores cuya exploración debe tramitar el juez de Menores a instancia tanto del Ministerio Público como del letrado de la familia de la víctima pertenecen al círculo de los detenidos y sus nombres salieron a relucir en la declaración que "algunos de ellos" prestaron ante la fiscal en sede judicial después de su detención hace dos semanas.
La acusación particular solicitó, asimismo, a través de otros tres escritos que se intervenga y dé trasladado de la totalidad del contenido de los perfiles en la red social 'Tuenti' de los seis imputados ya que, en el sumario se recogen únicamente los extractos de las conversaciones que condujeron a la Guardia Civil hasta ellos. En concreto, solicitó el histórico de la cuenta desde el 1 de octubre de 2012 hasta el pasado 30 de enero.
Cabe recordar que los padres del joven Nasr, que ya han pasado por sede judicial para prestar declaración en calidad de perjudicados-denunciantes, presentaron denuncia por su desaparición el 20 de noviembre y su cuerpo sin vida, con evidentes signos de violencia, fue encontrado el 17 de diciembre semienterrado en la playa, junto al camping de Almerimar.
SUMARIO
El expediente por el crimen recoge que el cerco sobre los presuntos autores materiales de la muerte, de 14 y 16 años, se estrechó con un informe de la Guardia Civil que señalaba "contradicciones y discrepancias" en las que habrían incurrido al relatar qué hicieron el día de la desaparición y dónde estuvieron ya que, desde un primer momento, los padres de la víctima aseguraron a los agentes que había quedado para "tomar café".
Estas contradicciones se habrían reforzado al enfrentarlas con los datos arrojados por los repetidores de telefonía. El juez autorizó la intervención de las cuentas de ambos en la red social 'Tuenti' el 16 de enero y 48 días después hacía lo propio con los terminales telefónicos. La transcripción de las comunicaciones reveló "indicios claros" que apuntaban a la participación de ambos en la desaparición y muerte, y señaló a los cuatro presuntos encubridores "con los que se jactaban de lo sucedido y a los pedían silencio".
Los dos principales acusados, de nacionalidad española, admitieron en su testimonio ante la fiscal de menores su implicación en distinto grado en los hechos. El menor de 14 años reconoció haber apuñalado a Nasr aunque señaló a su amigo de 16 años como el primero en asestar una cuchillada mientras que este último afirmó que presenció únicamente la agresión mortal.
Ambos habrían indicado al fiscal que medió una "discusión" y que no tenían intención de matar a la víctima cuando quedaron con él a las puertas de un supermercado de Almerimar pese a que en el sumario constaría que ambos salieron armados de sus casas con sendos cuchillos. El cuerpo sin vida fue enterrado al día siguiente en la playa de Almerimar, junto al camping, donde lo habrían dejado envuelto en "una especie de plásticos blancos".
Los cuatro adolescentes señalados como presuntos encubridores declararon ante la fiscal que guardaron silencio sobre el crimen "por miedo a represalias" si bien la Guardia Civil considera, de acuerdo al contenido de las intervenciones de sus teléfonos autorizadas por el juez, que participaron "activamente" en "mantener el secreto" e, incluso, les "apoyaron".
El móvil que estaría detrás del crimen apunta que existía "trapicheo" con objetos de valor como "teléfonos móviles, bicicletas y videoconsolas". La comunicaciones intervenidas durante la operación denominada 'Airsoft', que permitió la intervención entre otros efectos de las herramientas con las que se enterró el cadáver del joven de 18 años, revelaron que los implicados en los hechos tenían "algún tipo de relación con el menudeo de droga".