Una madre y sus dos hijos, de origen italiano, están empadronados en la tienda de campaña en una azotea de una vivienda en Santa Cruz de Tenerife que se alquila desde hace años a través del portal de alquiler vacacional AIRBNB por 12 euros la noche.
Según han confirmado a EFE fuentes del Ayuntamiento, ya se han retirado todas las casetas de la azotea y los menores y su madre, de nacionalidad italiana, están empadronados junto a otras cinco personas en la vivienda de la mujer que gestionaba presuntamente el alquiler de las casetas en la azotea.
Además, según el consistorio, el área de Servicios Sociales no tiene constancia de que haya algún problema que afecte a los menores en cuestión, si bien este área se encuentra "pendiente por si se requiere su intervención, pero por el momento no ha sido requerida".
En los últimos días, y después de que el periódico El Día avanzase el caso y se viralizasen las fotos, en las que se pueden ver varias casetas de campaña al sol en una azotea, el Ayuntamiento ha conseguido notificar a la propietaria del segundo piso, que presuntamente coordina el alquiler de las casetas, que cese la actividad "clandestina".
La azotea se encuentra en la calle Castellón de la Plana de la capital tinerfeña y para este hecho el consistorio prevé que la sanción, calificada como "muy grave", pueda oscilar entre los 15.000 y los 30.000 euros de multa.
Al parecer, una de las vecinas del bloque, ajena a la actividad, había denunciado la situación desde hacía al menos año y medio, si bien no ha sido hasta esta semana cuando tras una inspección de la Policía Nacional y una visita de la gerencia de Urbanismo, que ha derivado en la notificación de cese de actividad, cuando se ha precintado la azotea y se ha incoado el expediente.