El coordinador federal de Izquierda Unida, Antonio Maíllo, ha advertido del regreso "las grandes mentiras" como las de las armas de destrucción masiva para "justificar una guerra", en esta ocasión en Irán tras el ataque de Estados Unidos a instalaciones nucleares en ese país.
"Volvemos otra vez a la arma de destrucción masiva de Irak, de nuevo a las grandes mentiras para justificar una guerra, de nuevo a las grandes mentiras para justificar una situación que nos puede generar una regresión en términos económicos y que dificulte la recuperación y la conquista de derechos sociales", ha alertado en una entrevista en 'Onda Cero', que ha recogido Europa Press.
Para Maíllo, la situación tras los ataques de Washington a Irán es similar a la que tuvo lugar en 2003 cuando Estados Unidos y sus aliados, entre ellos España, invadieron Irak con la justificación de que el régimen de Saddam Hussein tenía en su poder armas de destrucción masiva que finalmente no se encontraron.
En este sentido, el político andaluz ha afeado la poca contundencia de la respuesta de España al ataque de Estados Unidos, que ha apelado a la negociación y a la diplomacia, pero no ha condenado de manera "explícita" el comportamiento de su presidente, Donald Trump.
"Por eso la hago yo, porque si no la hace nadie pues al menos hay una formación como Izquierda Unida que advierte de las consecuencias tan dramáticas y trágicas que puede tener algo que han hecho los gobiernos de Estados Unidos sobre una población", ha proseguido Maíllo.
Ha avisado a su vez de que Irán no es como otros países de oriente Medio, ya que tiene 90 millones de habitantes, por lo que un ataque contra Teherán es "un salto a unas dimensiones colosales". Además, ha señalado la "paradoja" de esta intervención norteamericana, ya que refleja la "debilidad de Israel", que habría tenido que acudir a su socio porque "no ha conseguido los objetivos militares que tenía previsto".
"EL 5% EN DEFENSA HUBIERA SIDO LA RUINA"
En otro orden de cosas, Maíllo ha valorado el acuerdo que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, cerró ayer con la OTAN para que España no se viera obligada a destinar el 5% de su PIB al gasto en defensa. En su opinión, ese nivel de gasto sería "simplemente al ruina para nuestro país".
"Imagine que todavía no hemos conseguido en 45 años el PIB de educación al 5%, por lo que simbolizaría pues una insostenibilidad manifiesta", ha añadido, si bien ha manifestado su desacuerdo con "el marco de la OTAN" en general, más allá del porcentaje del PIB que se destine a la defensa.
No comparte, por ejemplo, pertenecer a una alianza atlántica que "busca la escalada militar y un sistema que más que seguridad da inseguridad con el rearme". Lo que sí daría seguridad es "un sistema de cooperación, una gobernanza mundial de Naciones Unidas que está siendo ninguneada".
También sería importante que la Unión Europea fuera "un actor internacional no tan patético como lo está siendo" en cualquier conflicto y "con el doble rasero" con el que aplica su política internacional con respecto a Israel.
Tras decir que mantener la OTAN es la "garantía" de que Estados Unidos se sitúa por encima de Europa, ha recalcado que no importa si se trata del "5, del 3 o del 2 o un 1%" del PIB en gasto de defensa, sino de que se aborde un sistema de seguridad "que no tiene nada que ver con el rearme y el gasto militar, que tiene que ver con modelos de cooperación y con un sistema autónomo de seguridad europeo".
