Especialistas de la Universitat de Valencia, Avamet y Aemet apuntan al papel relevante que tuvo el barranco de l'Horteta en la dana del 29 de octubre que asoló la provincia y provocó la muerte de 228 fallecidos. En el 'Estudio cronológico de los volúmenes de precipitación en las subcuencas de la rambla de Poyo en el episodio del 29 octubre de 2024' --que acaba de publicar en su versión definitiva 'Investigaciones Geográficas', de la Universidad de Alicante-- se señala que "la hipótesis más probable es que la escorrentía que llegó primero a l'Horta Sud fue la generada en la subcuenca del barranco de l'Horteta".
El informe, del cual se conoció un avance en mayo, remarca el papel desempeñado por los barrancos de Horteta y Gallego, los dos "hermanos menores" del de Poyo. De hecho, plantea dos hipótesis principales, pero sostiene que "lo que seguro no ocurrió es que la responsabilidad principal fuera de las cabeceras de Poyo".
Los expertos --Alejandro J. Pérez Cueva y Ghaleb Fansa Saleh, de la UV ; Rafael Armengot Serrano y Adrián Revert Ferrero (Avamet); y José Ángel Núñez Mora, de Aemet-- exponen que el episodio de lluvias se ciñó estrictamente al 29 de octubre.
Aunque empezó a llover a primeras horas de la noche, no se han representado estas lluvias horarias al considerar que no son significativas. A las 05-06 horas apenas estaba lloviendo en el área de estudio, aunque sí lo hacía en la cuenca baja del río Magro. A las 07-08 horas ya se alcanzan intensidades horarias cercanas a 50 mm en las cabeceras de las cuatro subcuencas básicas (Grande, Chiva, Horteta y Gallego). Esta fase de lluvias se centra en Turís, tiene su máxima intensidad a las 08-09 horas, y declina a la hora siguiente, recuerfa el informe consultado por Europa Press.
Entre las 10 y las 15 horas disminuyen mucho las precipitaciones horarias e incluso deja de llover en amplios sectores de la cuenca de Poyo, sobre todo entre las 13 y 14 horas. La segunda fase de lluvias horarias empieza a las 15 horas. A esta hora ya se superan intensidades de 60 mm en observatorios de la cabecera del barranco de l'Horteta y de 120 mm en la hora siguiente.
Esta fase de lluvias --continúa el análisis-- alcanza la máxima intensidad entre las 18 y 19 horas, y se sigue focalizando en la cabecera de este barranco. De 17 a 19 horas las intensidades llegan a superar más de 100 mm/h en todas las subcuencas de Poyo, excepto en la cuenca del barranco Grande, y apenas se desplazan espacialmente.
A partir de las 19 horas se observa una paulatina disminución de las intensidades, hasta las 23 horas, y a la vez un desplazamiento hacia las dos cabeceras más interiores de la rambla de Poyo, las cuencas de los barrancos de Chiva y Grande. Aun así, se mantienen intensidades cercanas o superiores a 50 mm/h en algún observatorio hasta las 22-23 horas, en especial en la cuenca del barranco de Chiva.
Mientras tanto, en sectores cada vez más amplios de la parte central y baja del área, a partir de las 19 horas deja de llover. Esta subfase de lluvias "marcará un comportamiento diferenciado entre los aportes pluviométricos de la parte alta y de la parte media y baja de la cuenca".
Los investigadores afirman que es a partir de las cinco de la tarde, y hasta las ocho, cuando se producen "los máximos aportes pluviométricos". En estas tres horas la subcuenca de Horteta recibe 20,7 hm3. La siguiente subcuenca en importancia es la de Gallego, con 18,3 hm3, seguida de la de Poyo medio, con 14,4 hm3. Casi toda la escorrentía de esta última subcuenca es registrada en el aforo, y genera un caudal, hasta el momento de la rotura, de 2.283 m3 /s.
El agua caída en las dos subcuencas de cabecera (Grande y Chiva) se incorporaría más tarde. Los aportes pluviométricos de cada una de ellas solo superan 2 hm3 a partir de las 17 horas (PH18), y empiezan a ser superiores a las de las tres subcuencas de la parte media y baja, únicamente, a partir de las 19 horas (PH20).
Durante esta hora (PH20) el aporte de la subcuenca del Poyo medio es de 4,0 hm3 , también superior al input pluviométrico de las subcuencas de Horteta y Gallego. Horteta es la subcuenca con más aportaciones de agua precipitada en una hora (9,0 hm3 durante la PH18, de cinco a seis de la tarde), y solo empieza a declinar durante la PH20. A esta hora es superada ya por las tres subcuencas de Poyo antes del aforo, e incluso por la de Gallego.
"La subcuenca de Horteta, por tanto, es la que empieza antes a recibir las grandes aportaciones pluviométricas de la tarde, la que registra un mayor volumen de precipitación horaria y la que empieza antes a declinar, pues deja de recibir precipitaciones a partir de la PH21. Durante esa hora y la siguiente, solo las dos subcuencas de cabecera registran lluvias superiores a 2 hm3", inciden.
Por su parte, el conjunto de Possalet-Saleta sigue un comportamiento semejante al de la parte baja de la cuenca, con aportaciones máximas durante la PH18 (3,2 hm3 ), que cesan a partir de la PH20. Los volúmenes de agua precipitada no parecen corresponderse con la riada registrada en Aldaia, pero su escorrentía pudo verse incrementada por la derivación hacia el norte de parte de la inundación del Pla de Quart.
Además, la distribución espacial de las lluvias diarias muestra un episodio que no supera, pero se acerca, a los máximos registros citados en tierras valencianas y en la cuenca del Mediterráneo occidental, con valores cercanos a 1.000 mm/día en varios casos. La alta densidad disponible de observatorios automáticos, a pesar del reconocido problema inherente de infraestimación de la lluvia, ha permitido generar una detallada cartografía de precipitación horaria.
Y recalcan los expertos: "Esta es quizá la principal aportación novedosa del trabajo. La metodología utilizada puede extenderse a estudios de precipitaciones intensas de situaciones futuras, siempre que se disponga de una red suficientemente densa de observatorios que permita generar grids con una resolución adecuada".
Así, los resultados obtenidos con esta metodología han permitido la elaboración de hipótesis explicativas del episodio. El ritmo temporal y espacial de las aportaciones pluviométricas es "clave" para entender cómo funcionó la riada.
Para elaborar estas hipótesis, en especial para descartar el papel de la lluvia caída en cabecera en el inicio de la catástrofe, únicamente se relacionan los inputs pluviométricos con la respuesta del sistema. Los datos de esta respuesta muestran una "conclusión obvia": la escorrentía que entre las 18:55 y 19:00 rompió el aforo no pudo ser la misma que la que, a partir de las 18 horas, empezó a producir destrozos en el abanico aluvial de la rambla.
HIPÓTESIS "MÁS PROBABLE"
Por tanto, lo "más probable" es que la escorrentía que llegó primero a l'Horta Sud fue la generada en la subcuenca del barranco de l'Horteta con la aportación de Gallego y de la parte baja de la cuenca de Poyo.
La llegada de la escorrentía de Poyo tuvo una "dificultad añadida", pues parte de ella derivó hacia el NE y saltó a la cabecera del barranco de la Saleta, quizá ayudada por un "efecto de barrera hidráulica" provocado por la avenida de Gallego.
En todo caso, finalizan, solo caben dos soluciones: o se juntaron los picos de Horteta, Gallego y parte baja de Poyo (la que rompió el aforo con 2.283 m3 /s), y entonces la riada pudo triplicar o más esta cantidad, o llegaron primero las aguas de Horteta y seguidamente lo hicieron las de Gallego y Poyo, con una cierta laminación del pico de crecida.
"Lo que seguro no ocurrió en la riada catastrófica de la tarde del 29 de octubre de 2024 en el abanico aluvial de la rambla en l'Horta Sud es que la responsabilidad principal fuera de las cabeceras de Poyo, que tuvieron unos aportes más tardíos y más alejados del punto apical de este abanico".