Ante esta circunstancia Protección Civil y Emergencias han hecho públicos una seria de avisos y recomendaciones ante la presencia de vientos en la costa.
En ese sentido, advierten que si se encuentran en zonas marítimas, es conveniente alejarse de la playa y de otros lugares bajos que puedan verse afectados por las elevadas mareas y los oleajes que suelen generarse ante la intensidad de vientos fuertes.
Estas recomendaciones son una prolongación de las emitidas este pasado fin de semana en el que se decretó la alerta naranja por vientos fuertes y lluvias y que afectó en mayor o menor medida a toda la provincia gaditana dejando tras de sí calles anegadas, tejados levantados, y garajes y portales inundados.
Sin embargo, lo que es incomodo y perjudicial para unos, ya que la lluvia y el viento puede arrasar cosechas y cultivos en segundos, es bueno para otros, como es el caso de el agua embalsada en los distintos pantanos y embalses de la provincia, que siguen incrementado sus caudales hasta límites que no se conocían en los últimos años.
Sin ir mas lejos, durante estos últimos días, de fuertes aguaceros, los embalses han recibido hasta 49 hectómetros cúbicos de agua (más de un dos por ciento del total de agua embalsada) alcanzando casi un 47 por ciento de su capacidad total.
Eso sitúa a los embalses con un 15 por ciento de más caudal que el año pasado por estas fechas, y a embalses como el de Los Hurones, que está al 89 por ciento de su capacidad, después de que fuese necesario desembalsar parte de su contenido para evitar que llegase al límite.