Ésta fue una de las conclusiones de la Comisión Territorial de la Inspección de Trabajo que ayer presidió en Sevilla el consejero de Empleo, Antonio Fernández, y el director general de la Inspección de Trabajo del Ministerio, Raimundo Aragón.
Tras los buenos resultados obtenidos en el plan de este año, cuyo grado de cumplimiento ya roza el 96 por ciento, el plan del próximo año recoge 100.000 actuaciones, de las cuales 65.701 están ya programadas y se dividen en cuatro bloques: prevención de riesgos, empleo y relaciones laborales, seguridad social y economía irregular.
Las actuaciones dirigidas contra la economía sumergida -30.904- acaparan el 47,07 por ciento del total de las actuaciones y supone un aumento del 43 por ciento respecto a este año, cuando se han realizado 21.000.
Gracias a estas acciones, se ha conseguido, entre otros logros, que este año se transformen en indefinidos 9.734 contratos temporales en fraude de ley y se han inducido 8.398 altas en la seguridad social.
Según explicó el consejero, la crisis provoca "tentaciones" a la hora de cometer "pecados de sociedad", que consisten en trabajar irregularmente, lo que conlleva un perjuicio tanto para el trabajador como para la sociedad en su conjunto, al defraudar a la seguridad social y la hacienda pública.
Fernández apuntó que la economía sumergida no llega ni al 20 por ciento en el conjunto de sectores productivos en Andalucía, aunque ha indicado que "es alta".
En el bloque de empleo y relaciones laborales, el plan prevé 5.505 acciones, de las cuales 2.990 se dirigen al control del fraude en la contratación.
En respuesta al aumento del número de Expedientes de Regulación de Empleo presentados -aunque el consejero reiteró que Andalucía no es la comunidad más castigada-, se han planificado hasta 895 acciones de control.
En el eje de prevención, se han programado 15.471 actuaciones que, debido al descenso de la siniestralidad en la construcción -que ha caído en un 30 por ciento y en un 50 en el caso de accidentes mortales-, se han redistribuido con 7.290 acciones previstas -frente a las 10.254 de este año- que incluyen 500 para controlar los cumplimientos de condiciones laborales en las obras del Proteja y Memta.
En materia de Seguridad Social, la Inspección contempla 13.741 actuaciones, donde predomina la lucha contra el fraude en la cotización, la persecución de las prestaciones indebidamente percibidas, la detección de las deudas empresariales, el control de las bonificaciones y de las derivaciones de responsabilidad, entre otros.
Según explicó el director general de la Inspección de Trabajo, Raimundo Aragón, Andalucía cuenta con 137 inspectores y 161 subinspectores, a los que se suman los técnicos de los Centros de Prevención de Riesgos Laborales de la Junta, habilitados para colaborar en las tareas de vigilancia y seguimiento de la normativa de prevención.
Estos 298 efectivos, supone un incremento del 6,4 por ciento respecto a 2008.
