Cuántas veces nos preguntamos, ¿lo estoy haciendo bien como madre o padre?, ¿estaré educando a un niño/a sano?, ¿cómo será mi hijo/a cuando sea mayor?, ¿mi hijo/a tiene confianza en mí?
Qué importante es educar desde las emociones, qué importante es orientarles para que sepan identificarlas y gestionarlas.
Os aconsejo un libro donde poder mostrarles las emociones que pueden presenciar a lo largo de sus vidas. “Emocionario: Di lo que sientes” de Palabras Aladas. Donde muestra, por ejemplo, que tener miedo es algo necesario, el miedo nos previene de sufrir algún accidente.
Por las mañanas cuando me levanto y veo la carita de mi pequeña con esa sonrisa tan preciosa, pienso: ¿qué puedo hacer para que seas siempre feliz?
Seguro que muchos/as de vosotros/as también os lo preguntáis...
No se la respuesta de ello, pero si os puedo aconsejar que debemos darles a nuestros hijos/as la suficiente confianza para que nos expresen sus curiosidades y podamos orientales hacía lo que está bien. Enseñarle a identificar lo que les ocurre en cada momento y ayudarle a que aprendan a gestionar ese sentimiento sin que se derrumben o exploten, ello no es tarea fácil, pero si muy beneficiosa y se irá plasmando a lo largo de su vida.
Hacerlos felices no es lo mismo que darles todo lo que pidan, para nada. De hecho, es aconsejable que juntos creamos unas normas de convivencia, donde se indiquen las tareas que deben hacer cada uno de los miembros que conviven en el hogar familiar.
Desde muy pequeños hay que darles tareas para que vayan adquiriendo autonomía y responsabilidades.
A continuación, os adjunto una tabla, ejemplo de lo que vuestros hijos son capaces de hacer según la edad, os animo a que añadáis más cosas, hacerlo juntos, será divertido y se sentirán felices al saber que sus padres confían en que ellos pueden hacer muchas cosas.
