Agentes de la Policía Nacional han identificado y detenido a una mujer de 25 años por su presunta responsabilidad en un robo a la capilla de la Virgen de Carmen, en el Puerto de La Bajadilla de Marbella (Málaga).
Con la colaboración de la Policía Científica y tras el análisis exhaustivo de los vestigios hallados en el lugar de los hechos, los agentes han esclarecido la sustracción de diversas joyas de alto valor artístico y sentimental que portaba la imagen religiosa, atribuyendo el delito a una joven que había ingresado en prisión recientemente por otros ilícitos penales.
Los fieles a la Virgen del Carmen quedaron consternados al conocer el robo sufrido por la imagen religiosa situada en la capilla de La Bajadilla. Fue un vigilante de la zona portuaria el que alertaba de que el cristal donde se encontraba la Virgen había sido fracturado. Posteriormente, un representante de la Hermandad interponía la correspondiente denuncia por el robo de joyas de alto valor artístico y sentimental a la Virgen, iniciándose una investigación por parte del Grupo de Robos de la Comisaría de Policía Nacional en Marbella.
Según el relato policial, desde el comienzo de las pesquisas fue posible centrar a la presunta autora que fue plenamente identificada a través de los indicios obtenidos en la capilla.
Inicialmente se realizó una intensa búsqueda para su localización y, tras numerosas gestiones, se pudo dar con el paradero de esta persona en una prisión en la provincia, donde se encontraba interna por su implicación en otros hechos delictivos similares.
ESCLARECIDO OTRO ROBO EN UN HOTEL DE LA CIUDAD
En una investigación aparte, pero también en el terreno de los delitos contra el patrimonio, los agentes del referido Grupo de Robos tuvieron conocimiento mediante denuncia del robo de diverso material de conservación y lucimiento en un almacén de un hotel de la ciudad marbellí, lo que había generado un enorme perjuicio para el establecimiento de cara a la época estival.
Tras las gestiones para determinar la autoría de los hechos, se pudo identificar en un corto periodo de tiempo al presunto artífice, que fue arrestado por los agentes.
En el registro en su domicilio, la Policía consiguió recuperar prácticamente la totalidad de los efectos sustraídos, por valor de 8.500 euros, que fueron entregados a su propietario.
