El Área Sanitaria Norte de Málaga ha adquirido el equipamiento necesario para la realización a gran escala de técnicas de amplificación genética para la detección del virus SARS-CoV-2, que permitirá al Hospital de Antequera procesar más de 200 muestras diarias, y evitará la derivación de muestras a otros centros hospitalarios para su análisis.
Desde el inicio de la pandemia, el servicio de laboratorio del Hospital de Antequera ha dado una respuesta rápida (1 hora) a los diagnósticos COVID-19 mediante la realización de PCR en casos urgentes, aunque la limitación de procesamiento de los analizadores monocanal obligaba a la derivación de parte de las muestras recibidas a centro de referencia.
El equipamiento recién adquirido permite analizar el conjunto de muestras pertenecientes al área sanitaria, lo cual supone una importante reducción en los tiempos de respuesta (24-48 horas), han informado desde la Junta en un comunicado.
La dotación incluye un extractor de material genético NX48S para la obtención de RNA viral a partir de muestras respiratorias (exudado naso y orofaringeos, lavado/aspirado broncoalveolar) con una velocidad de procesamiento de hasta 46 muestras simultaneas en 30 minutos, así como de un termociclador CFX96 con capacidad de realizar 96 rtPCRs en tiempo real cada dos horas.
Este analizador permite analizar de forma simultánea 3 genes por muestra, incluyendo una región genérica de SARS (gen E), una región específica de SARS-CoV-2 (gen N) y una región del gen RNasaP humano como control de extracción/amplificación.
Asimismo, han detallado que teniendo en consideración los recursos humanos y materiales del centro, los procedimientos preanalíticos y el análisis postanalítico de los resultados obtenidos, el Área Sanitaria Norte de Málaga tiene capacidad para realizar hasta 200 análisis diarios.
La implementación de la tecnología descrita constituye un importante avance para el diagnóstico y seguimiento de nuestros pacientes, agilizando la detección de casos positivos, facilitando la toma de decisión para los ingresos hospitalarios, mejorando los tiempos de inicio de tratamientos dirigidos y minimizando los aislamientos innecesarios de contactos y casos sospechosos.
