Cierra una excelente segunda sesión clasificatoria la comparsa de Rober Gómez y Pepe Juan Pastrana, representando en su tipo a unas mujeres que no se pliegan a las normas sociales y por ello son tachadas como ‘la mala’, porque van a contracorriente. Van también un poco aceleradas y lo acusa la interpretación de los pasodobles. El primero es un llamamiento para que el puente Carranza cambie su nombre por el de Puente de los Obreros, en homenaje a la lucha por sus empleos que hasta allí llevaron tantos y tantos trabajadores de astilleros. Luce aún más el segundo, para recordar que el sexo no se asemeja a una pornografía que crea unos patrones que normalizan el abuso y la sumisión de la mujer. Gran letra. Quieren quitarse de las playas a los madrileños y los sevillanos en el primer cuplé; el segundo va para un reloj inteligente que las anima a hacer deporte. El exigente ritmo del popurrí lo hace algo menos disfrutable.
Lo mejor Sus dos pasodobles, especialmente el segundo por el potente mensaje acerca de la nociva influencia de la pornografía en la juventud
Lo peor Que el grupo vaya tan acelerado no ayuda a disfrutar de la melodía