El último escalón del Algeciras para alcanzar una eliminatoria histórica para el club en la Copa del Rey pasa por vencer al Haro en su campo de El Mazo mañana. No será fácil, aunque el conjunto riojano no ha podido hacer de su estadio un fortín en las últimas campañas pese a su extraordinario rendimiento en Liga.
Sin duda, la calidad de los rivales que se le presentan en el grupo riojano de Tercera ha influido para que el rival albirrojo permanezca invicto, en Liga, en su feudo desde el 8 de enero de 2012, cuando la Sociedad Deportiva Logroñés le derrotó por 0-2. Desde entonces sólo ha cedido cinco empates en casa y cuenta por victorias, muchas de ellas con goleadas, sus encuentros de Liga en el grupo XVI de Tercera División.
Sin embargo, su impecable andadura liguera como local no ha encontrado continuación en los decisivos partidos de la fase de ascenso a Segunda División B, que ha disputado en las últimas temporadas.
En la campaña 2011/12, aquella en la que sufrió su última derrota liguera en casa, se enfrentó al Extremadura y aunque venció por 1-0 en el choque de vuelta, no fue suficiente para remontar el 2-0 con el que los de Almendralejo llegaban de la ida.
La pasada campaña, al igual que el Algeciras, disputó la fase de campeones de grupo. El Sariñena le derrotó 0-1 en El Mazo para redondear con otro 1-0 en la vuelta y lograr el ascenso. En la siguiente ronda, el Haro había logrado vencer al Mar Menor a domicilio por 1-2, pero el partido de vuelta en el bonito estadio riojano terminó con 1-3 y el sueño roto.
En la presente Copa del Rey, en la que los caminos del Haro y el Algeciras se cruzan mañana, el equipo riojano ha superado dos eliminatorias, ambas disputadas como local, y ha mostrado una gran solvencia defensiva, ya que ha sido capaz de no encajar ningún tanto, si bien sólo ha marcado uno en dos partidos, suficiente para echar en los penaltis al Oviedo (0-0) y tomarse una revancha ante el Sariñena (1-0).
