El alcalde de san Roque, Juan Carlos Ruiz Boix, se lamentó ayer por la “instrumentalización política” que el PP ha hecho, a su juicio, de la denuncia de un ciudadano por no dejar grabar un pleno.
“El PP utiliza como un kleenex al denunciante para dañar mi imagen”, comentó Ruiz Boix, quien recuerda que el denunciante “ha sido acompañado hoy al juzgado por el presidente del PP, Carlos Mescua, un concejal del PP, José Luis Navarro Sampalo, y un miembro de dirección general del PP, Ramón Aranda”.
Balance positivo
Insiste Ruiz Boix en que “todo es una actuación política para deteriorar mi imagen, y la conclusión que saco es que, después de 28 meses de alcalde, me siento satisfecho que esta es la única denuncia que tengo y la conozco según los medios” -el alcalde insiste en que no se le ha notificado oficialmente- y que además no va a llegar a nada”.
En este sentido, recuerda que no está imputado “por haberme repartido 40 millones de pesetas, ni por estar implicado en una adjudicación ilegal, donde hay imputados del Partido Popular por prevaricación, cohecho, malversación y otros delitos mayores”.