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Miércoles 27/11/2024
 
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España

Pedro Sánchez advierte a Casado que España está "hasta la coronilla" de su bronca

"Lo que hacemos es política útil, que es pasar de las abstracciones a las cosas concretas", ha añadido

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  • Pablo Casado. -

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha defendido este miércoles la "política útil" de su Ejecutivo frente a "la bronca, los insultos y los gritos" del PP, a cuyo líder, Pablo Casado, ha advertido de que los españoles están "hasta la coronilla" de esa actitud.

Sánchez ha respondido de esta forma a Casado en la sesión de control del pleno del Congreso, donde el líder del PP había instado al jefe del Ejecutivo a aclarar si tiene un proyecto para España y a responder a tres cuestiones.

En concreto, si él es "la "X" del caso del líder del Frente Polisario, Brahim Gali, si ordenó falsear las previsiones económicas del Instituto Nacional de Estadística para "cuadrar a martillazos el presupuesto con Podemos" y si va a cumplir su palabra de traer a España al expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont.

Tras esas preguntas y los argumentos que ha utilizado el líder del PP para defenderlas, Sánchez le ha preguntado si no se ha dado cuenta de que los españoles "sean de derechas, de izquierdas, de centro, de norte, del sur, de las islas o de la península, están hasta la coronilla de la bronca, los insultos y los gritos que profieren -ha dicho- en este Parlamento".

A la cuestión de si tiene un proyecto para España ha contestado afirmativamente diciendo que pasa por lograr una recuperación económica justa tras hacer frente a la mayor pandemia de la humanidad en cien años y con una gestión que ha defendido.

"Lo que hacemos es política útil, que es pasar de las abstracciones a las cosas concretas", ha añadido antes de poner como ejemplo medidas aprobadas en el último Consejo de Ministros como la subida del salario mínimo, las ayudas a La Palma y la prolongación de los ERTE.

A continuación ha pedido a Casado que él y el PP arrimen el hombro y ayuden a su país con decisiones como el cumplimiento de la Constitución.

Al hilo de ello ha pedido al Partido Popular que acepte que está en minoría, que ha sido derrotado en las urnas, que abandone la "insumisión constitucional" y que permita la renovación del Consejo General del Poder Judicial

El presidente del PP ha lamentado que Sánchez no contestara a sus preguntas y se las ha vuelto a repetir instándole a que respondiera con un sí o no.

"Si no está dispuesto a defender a España de delincuentes y de la crisis económica que usted ha empeorado, váyase y déjenos a los demás hacerlo", ha añadido.

Sánchez ha dicho que "ante ese juego del sí o no", Casado debería responder afirmativa o negativamente si está a favor de revalorizar las pensiones conforme al ipc y de validar en el Parlamento el acuerdo de pensiones entre los agentes sociales.

Previamente y en desarrollo de sus preguntas, Casado ha pedido a Sánchez que aclare si en el caso Gali permitió la entrada en España a "un individuo en busca y captura por genocidio, terrorismo y violación".

Al respecto, ha señalado que si usa su cargo para eludir una investigación judicial, comete un delito de encubrimiento, y si dicta una resolución a sabiendas de que es injusta, el delito es de prevaricación.

En cuanto a los datos de la recuperación económica le ha advertido de que mentir a los españoles y a Europa es muy grave y le ha culpado de que España sea el país del mundo desarrollado que más PIB y empleo ha perdido y más va a tardar en recuperarlo.

"Es de vergüenza que tenga ministros peleándose en público por las pensiones, la reforma laboral, el salario mínimo o la luz. Ponga orden en esa jaula de grillos de una vez", le ha espetado.

En relación con Puigdemont ha pedido a Sánchez que diga si va a traerle a España "o va a seguir torpedeando a la Justicia con indultos aquí y con la Abogacía del Estado fuera".

Para Casado, el hecho de que el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès haya dicho que forzará al Estado hasta que acepte un referéndum de independencia, es motivo suficiente para que el Gobierno se levantara de "esa mesa de independentistas" (en alusión a la mesa de diálogo) e hiciera una campaña internacional para que se respete a la justicia española en todos los países.

Su conclusión es que el proyecto de Sánchez para España es permanecer en el poder incluso con aquellos que quieren romperla.

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