Un agente de la Policía Nacional libre de servicio rescató el pasado 30 de septiembre a un anciano de 85 años con dificultades visuales que se había perdido en una zona de media montaña, entre los términos municipales de Huétor Vega y Monachil. La hija del octogenario pidió ayuda al policía porque llevaban un rato buscándole y no le encontraban.
Según relató al agente, su padre había salido alrededor de las 9,30 horas de ese mismo día desde su domicilio con la intención de caminar por una ruta de montaña. A pesar de sus limitaciones físicas, el hombre se encuentra en buena forma física y suele realizar estas rutas sin problema.
Llevaba consigo su teléfono móvil y había contactado en varias ocasiones con sus familiares, pero no podía precisar su ubicación, pues se encontraba confuso, cansado y desorientado. El agente contactó con él y, tras intentar sin éxito que activara la localización en su móvil, le recomendó que no se moviera del lugar para evitar riesgos mayores, al tratarse de una zona de barrancos y enclaves de difícil acceso.
Desde los servicios de emergencia se inició un dispositivo de búsqueda y este agente siguió por su parte la senda que a su juicio pudo tomar el anciano logrando así encontrarle en mitad de un barranco de difícil acceso. El hombre estaba de pie, apoyado en sus bastones, bastante desorientado, algo confuso y mareado, pero su aspecto físico era bueno.
Aunque no necesitó asistencia de los servicios sanitarios desplazados al lugar, fue trasladado a un centro sanitario para confirmar que no había sufrido lesiones.
