La Asociación de Hosteleros de Málaga (Mahos) ha mostrado su apoyo a los bares de ocio nocturno y las discotecas, cuya actividad va a evaluar la Junta de Andalucía en los próximos días para estudiar posibles restricciones añadidas a las que ya se aplican.
Mahos ha considerado en un comunicado remitido a Viva Málaga que estos establecimientos “ya aplican las medidas más exigentes contra el covid-19, entre las que destacan la ausencia de pistas de baile, el servicio en mesas o el aforo del 40 por ciento. Además, aseguran que la actividad de los bares de ocio nocturno y discotecas “está perfectamente regulada” por decreto de la Junta de Andalucía.
Han recordado que este tipo de negocios “fueron los últimos en abrir sus puertas” en la desescalada y que, por lo tanto, “no se debe demonizar a un sector que afronta una conversión tan exigente en su modelo de negocio”.
En lo que respecta a la provincia de Málaga, el comportamiento de los empresarios de ocio nocturno y discotecas ha sido, hasta la fecha, ha sido, según el colectivo, “de absoluta observancia de las normas” sin que se haya detectado “ningún brote específico relacionado con estos negocios”. Por tanto, hacen hincapié en que “no cabe perjudicar a un sector con nuevas prohibiciones que podrían obligar al cierre de muchos de ellos y a la pérdida de numerosos puestos de trabajo”.
Por otra parte, aseguraron que las autoridades sanitarias establecen que el mayor rango de contagios se da en reuniones y encuentros familiares y también en botellones y fiestas privadas que no gozan del control que sí garantizan los bares de ocio nocturno y discotecas.En este sentido, Mahos destacaron que la Policía ya ha comunicado que rastrea estas fiestas privadas y apuesta por un mayor control de las áreas de botellón, “donde las distancias no se respetan y no hay manera de garantizar el uso de medidas de protección obligatorias como las mascarillas o la desinfección”.
No obstante lo anterior, Mahos insiste en su exigencia a todos los empresarios del sector de la hostelería en general de que “respeten y apliquen las normas sanitarias emanadas de las autoridades competentes como manera más adecuada de reducir la posibilidad de contagios y disfrutar correctamente de los bares y restaurantes”.
