Unicaja de Málaga se ha reencontrado con la victoria en la Liga Endesa y en una cancha tan difícil como la de Valencia Basket, de donde ha salido triunfador este domingo en un partido muy igualado que terminó con 66-71 para los de Luis Casimiro.
Los cajistas fueron de menos a más para culminar la remontada en la segunda parte del partido, donde se mostró más fuerte que su rival y mejoró unos números en los porcentajes de tiro bastante bajos, para rematar en el último cuarto en el que controló el tempo del juego.
Los nombres propios fueron los de Brizuela, muy inspirado durante todo el partido, Nzosa, que volvío a dar un recital defensivo a base de tapones, Alberto Díaz, que llevó la batuta, y un Abromaitis que firmó 20 puntos, cinco rebotes y seis asistencias.
En efecto, la presencia del larguísimo adolescente Yannick Nzosa, 16 años, bloqueó por completo el ataque del Valencia Basket, que no supo cómo sortear al pívot congoleño y acabó cayendo ante un Unicaja, al que alimentaron Tim Abromaitis y Darío Brizuela.
Salió el Valencia disparado impulsado por la confianza de su victoria en la Euroliga ante el Real Madrid, por su buena defensa y por los puntos de Prepelic. Tuvo que pararlo Luis Casimiro para que no se le fuera y lo logró. Su equipo subió la presión y un par de triples de Tim Abromaitis le dieron aire (20-18, m.10).
Al equipo malagueño, empeñado en el triple pero con mala puntería, le costó ponerse por delante. Lo logró finalmente con las penetraciones del escurridizo Darío Brizuela y cuando el largo y jovencísimo Nzosa obligó a cambiar casi cada tiro de los locales (24-28, m.16).
Pero la marcha del adolescente pívot al banquillo con su segunda permitió al Valencia volver a darle la vuelta al choque centrando su juego en los sólidos Nikola Kalinic y Bojan Dubljevic. Ambos fueron clave en el 9-0 que precedió al descanso (33-28, m.20).
El paso por el vestuario cambió de nuevo el guion. Los visitantes recuperaron la agresividad y Abromaitis puso los puntos, pero esta vez el Valencia reaccionó antes e hizo girar su juego alrededor de Kalinic, que al poste bajo hizo mucho daño al Unicaja pero que también con su defensa le puso en problemas.
Como en la primera parte, la entrada de Nzosa se le atragantó al Valencia, que no supo cómo gestionar su presencia y se atascó dando motivos a Alberto Díaz o a Wackzynski para creer en el triunfo (59-63, m.33).
Salió Dubljevic al rescate del Valencia para forzar un final apretado, pero Casimiro se había guardado la carta de Brizuela, que con su talento descansado recuperó la renta andaluza y aunque luego falló cuando pudo rematar, los locales le devolvieron los regalos y el triunfo fue finalmente para el necesitado equipo malagueño.
Ficha técnica:
66.- Valencia Basket (20+13+18+15): Vives (3), Prepelic (10), Kalinic (14), Williams (-), Dubljevic (15) -cinco titular- San Emeterio (4), Labeyrie (3), Tobey (10) Van Rossom (2) y Hermannsson (5).
71.- Unicaja (18+10+21+20): Alberto Díaz (9), Alonso (2), Bouteille (9), Thompson (4), Guerrero (1) -cinco inicial- Wackzynski (5), Suárez (-), Brizuela (16), Abromaitis (20), Sánchez (-) Gerun (3) y Nzosa (2).
Árbitros: González, Castillo y Perea. Sin eliminados.
Incidencias: partido correspondiente a la quinta jornada de la fase regular de la Liga Endesa disputado en el pabellón de la Fuente de San Luis a puerta cerrada por las restricciones por la pandemia de COVID-19.
