La Esperanza

Es probable que algunos esperen que me meta en un nuevo charco cofrade. Nada más lejos de mi intención. Quizás, al haber titulado mi artículo con la E mayúscula, haya dado lugar a la confusión. 
De cuatro paredes ha construido una casa con historias espeluznantes y vidas machacadas Es verdad que la esperanza es lo último que se pierde, al igual que nos sucede con los sueños o las ilusiones, que suelen verse de color oscuro pero que siempre deja un hilillo de luz por muy débil que sea.
Esperanza es levantarse por la mañana y pensar, después de lo vivido la noche de ayer, que hay que seguir para adelante, que hay que arrimar el hombro y que, cuando se pide ayuda para los demás, estamos haciendo lo correcto.
Esperanza es cuando no se ve la salida, pero se abre un huequecito que dibuja una sonrisa en tu cara, como si te fuera la vida en ello (que ciertamente te va) hasta conseguir el objetivo.
Esperanza es no saber qué va a pasar mañana o con quién me voy a encontrar, pero entender que la siembra está preparada y que empezará a brotar en breve… y si no, a plantar otra cosa. Algo crecerá.
Esperanza es ignorar los golpes de pecho y los abrazos de oso, aun sabiendo que hay que hacer lo que hay que hacer y porque hay que hacerlo. Punto. No queda otra.
Y Esperanza es el apellido del Hogar que está construyendo Daniel “Danielón” Marín Gálvez. Es envidiable la sencillez y la humildad con la que se entrega, con la ayuda de Eduardo y de Carlos, a esas personas que lo han dado casi todo por perdido. De cuatro paredes ha construido una casa con historias espeluznantes y vidas machacadas. Un golpe de realidad cada vez que se visita ese Hogar de la Esperanza y otro golpe de solidaridad sin ideologías, sin puños ni palmas levantadas, sin esperar nada a cambio. La solidaridad, la ayuda, no tiene colores ni banderas.
Me encantó una frase que Daniel tiene en su Facebook, escrita por el poeta portuense Luis Galán: “Me moriré esperando que estalle una guerra de matarse a besos”. Dani, gracias por mostrarnos lo que se debe hacer.