Un total de seis estudiantes del barrio de Las Palmeras han culminado con éxito el curso académico 2024/25 gracias a las ayudas recibidas para poder continuar con sus estudios, y la sa Sala Mudéjar del Rectorado ha acogido este lunes el acto oficial de clausura de curso, con la imposición de becas al alumnado que ha promocionado y el reconocimiento a los seis estudiantes voluntarios de la UCO que han acompañado y motivado a estos alumnos a terminar con éxito el curso.
Las familias del alumnado de Las Palmeras han recibido una ayuda económica para cubrir necesidades básicas, complementada con la entrega de ordenadores y el desarrollo de competencias lingüísticas mediante un curso de 60 horas de inglés a través de UCOidiomas. A ello se suma el acompañamiento educativo destinado al alumnado de Bachillerato, Formación Profesional y el segundo ciclo de Educación Secundaria Obligatoria (ESO).
Este programa busca aumentar la implicación de los estudiantes en las enseñanzas preuniversitarias, evitando así el absentismo y el abandono escolar. Además, se pretende reducir el nivel de fracaso escolar, facilitando el acceso de los estudiantes a la Universidad de Córdoba y promoviendo su éxito académico.
Otro de los objetivos fundamentales es fomentar el retorno de la inversión pública en la mejora del barrio, asegurando que la formación académica de los alumnos contribuya a la transformación y desarrollo de su entorno.
El rector de la UCO, Manuel Torralbo, ha presidido el acto, y ha expresado su compromiso con la continuidad del mismo. Ha felicitado a los estudiantes, animándolos a ser embajadores del programa en su barrio, y se ha congratulado del nuevo convenio firmado entre la UCO, Fundecor y CaixaBank, que permitirá recuperar y ampliar las becas para el próximo curso, pasando de seis a 13 becas. "Es una muestra clara del compromiso de CaixaBank, que lleva más de cinco años apostando por este programa", ha indicado.
Oportunidades reales
Por su parte, la vicerrectora de Igualdad, Inclusión y Compromiso Social, Sara Pinzi, ha recordado el impacto que este proyecto ha tenido a lo largo de estos años. Desde 2018, se han concedido 56 becas anuales, 39 de ellas financiadas por la Universidad de Córdoba y 17 con apoyo de Fundación La Caixa, CaixaBank, Cajasol y Fundecor. La financiación total asciende a 196.500 euros por parte de la UCO y 87.776 euros por parte de las entidades colaboradoras.
"Estos recursos, no son solo cifras y becas, son oportunidades reales que han llegado, hasta hoy, a 36 jóvenes distintos del barrio de Las Palmeras. Muchos de ellos han recibido el apoyo durante más de un curso, y han aprovechado esa oportunidad con una fuerza admirable", ha explicado.
El 90% ha logrado superar su año académico con éxito, y más del 70% ha conseguido titular en la ESO o acceder a Formación Profesional. "Pero si hay algo que emociona de verdad, es lo que ocurre cuando ese esfuerzo colectivo se convierte en un sueño cumplido. Hoy, cuatro estudiantes que pasaron por este programa están en la Universidad de Córdoba, caminando con paso firme hacia su futuro".
"Una de ellas, Judith, lo ha conseguido todo, pues este mismo viernes se gradúa en Educación Social, y ya está trabajando como educadora en su propio barrio. Judith no solo representa el éxito de una persona: representa la esperanza de un barrio, el sentido de una universidad comprometida y la certeza de que la transformación es posible cuando se pone la educación en el centro", ha subrayado.
Por su parte y en nombre del estudiantado becado ha intervenido María Dolores Carmona, quien ha afirmado que recibir esta beca "no es solo una ayuda económica, es una oportunidad de seguir adelante, de mantener viva nuestra vocación por aprender, y de seguir construyendo nuestro futuro a través del estudio".
María Dolores ha explicado que no siempre es fácil compaginar la vida personal, laboral y académica. "Muchas veces se hace cuesta arriba, no solo por el esfuerzo que implica estudiar, sino también por las dificultades económicas que muchas familias enfrentamos. Por eso, esta beca significa muchísimo más que una simple ayuda, es un impulso, que nos da fuerza para continuar".
Andrea Marín León, en representación del grupo de voluntariado, por su lado, ha dirigido unas palabras a los estudiantes becados. "Nos habéis enseñado a ser positivos, a no rendirnos en los momentos difíciles, a preocuparnos por los demás y, sobre todo, a encontrar la manera de hacer que las cosas funcionen. Hemos terminado con el corazón lleno porque hemos dado, sí, pero también hemos recibido. Por eso, hoy os digo que no dejéis nunca de aprender, en la vida hay que ser curiosos, tener inquietudes y seguir formándonos. Nosotros vamos a seguir aquí para lo que necesitéis".
