Una exposición inaugurada este viernes en el Parque de las Ciencias de Granada recorre la trayectoria pedagógica y vital del reconocido investigador italiano Francesco Tonucci a través de dibujos originales, objetos y talleres que profundizan en un concepto de educación basado en el respeto y la escucha a los niños y en el valor de la participación para fomentar el aprendizaje y promover la curiosidad.
Se trata de la muestra temporal 'Imaginar la educación. 50 años con Frato', que dedica 1.500 metros cuadrados a la educación, la infancia, la pedagogía y la importancia social de los "buenos profesionales" de la educación, tal y como se ha puesto de manifiesto durante la inauguración de la exposición, a la que ha acudido la consejera de Educación, Adelaida de la Calle, y el propio investigador.
La consejera ha destacado una corriente que "mira a través de los niños para hacer educación y para aprender a través de su mirada" cómo desarrollan su inteligencia, un asunto que puede apreciarse en esta exposición que "irá evolucionando" y estará "viva" a través de los diferentes talleres que se vayan impartiendo.
Francesco Tonucci ha vinculado esta muestra al mensaje de que la "educación hay que imaginarla, porque así como está no nos gusta", un extremo que pone en evidencia en sus viñetas, que usa como instrumento de denuncia de todo aquello que debería ser modificado para una ofrecer una mejor educación a los niños.
El mensaje va destinado tanto a las escuelas, como a los profesores, los padres y la sociedad en su conjunto, que "tienen la necesidad de reflexionar si lo que están haciendo es suficiente e imaginar una educación mejor", ha relatado el pedagogo, que también se ha mostrado defensor de que los más pequeños desarrollen su creatividad y trabajen con sus manos, especialmente en un momento tecnológico donde "parece que podemos movernos por el mundo con un dedo".
Así, esta exposición es una invitación a pensar, a discutir prácticas desacertadas, a imaginar un cambio. Al mismo tiempo, se revela como una oportunidad para mostrar la inteligencia y la creatividad de los niños y los adultos, su capacidad para aprender y construir.
La muestra está estructurada en torno a diez ámbitos que ayudan a reflexionar y tomar conciencia desde el punto de vista de los niños frente a realidades cotidianas como la escuela, la casa, el juego, la ciudad y el aprendizaje.
La bienvenida al visitante la dan las viñetas de Frato, con algunas de las ilustraciones mas representativas del pedagogo italiano. Su reivindicación sobre la importancia de integrar actividades manuales y oficios en la escuela también se materializa en la muestra con el espacio 'Cien manos, cien lenguajes', donde a través de imágenes y propuestas interactivas se provoca al público a que use sus manos para pensar y experimentar. Le siguen otros siete ámbitos más basados en la participación, la creatividad y la imaginación.
La muestra se completa con un programa de actividades complementarias dirigidas a la comunidad docente, como cursos, jornadas, conferencias y talleres.
