La juez de Instrucción 5 de Sevilla ha aplazado para mañana la declaración como imputada de una médica imputada junto a dos compañeros del hospital Virgen del Rocío que atendieron a un polaco indigente de 23 años, que murió en un albergue poco después de ser dado de alta del centro sanitario.
El aplazamiento se ha decidido debido a la acumulación de declaraciones pendientes en el juzgado, según han informado los abogados de la acusación, que representan a los familiares del fallecido y a la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía.
El nuevo calendario de declaraciones incluye la citación de la imputada mañana, cuando también declarará otro doctor pero como testigo, otro imputado lo hará el jueves 20 de noviembre y el tercer médico acusado está citado para el 9 de diciembre, según los abogados.
El joven murió el 2 de octubre del 2013 en un albergue municipal de Sevilla y no recibió el tratamiento adecuado en el hospital Virgen del Rocío, según el informe forense entregado a la juez que investiga el caso.
El informe recoge que, según las indicaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), "un estado de desnutrición severa como la que presentaba" el indigente "es indicativo de hospitalización, tratamiento de la malnutrición" y obligaría a realizar pruebas diagnósticas para la detección de las enfermedades de base.
En este caso, "la realización de dichos estudios hubiera permitido llegar al diagnóstico de la patología asociada a la desnutrición y la instauración del tratamiento específico", dice el informe entregado a la juez de instrucción 5 de Sevilla.
Piotr Piskozub, de 23 años y solo 45 kilos de peso, fue atendido a las 00.58 horas del 2 de octubre del 2013 en el hospital Virgen del Rocío, donde los médicos observaron su "estado de desnutrición severo" pero el resto de pruebas practicadas (auscultación y exploración física) resultaron con hallazgos inespecíficos, según el informe.