La empresa municipal de transportes de Sevilla, Tussam, va a proceder a modificar su oferta con la suspensión temporal de las líneas nocturnas y el refuerzo de sus servicios en horario de mañana, con objeto de adaptarla a las nuevas medidas de la Junta de Andalucía frente al COVID-19. Esta modificación, incluida en los acuerdos del Comité de Seguimiento Municipal ante la crisis sanitaria, entrará en vigor mañana. El resto de líneas de Tussam mantienen sus horarios.
Así, esta modificación incluye la supresión temporal de todas las líneas nocturnas, que actualmente solo prestaban servicio de 00.00 a 2.00 horas con tres salidas desde el Prado de San Sebastián, una cada hora. Los horarios de las líneas nocturnas ya fueron modificados desde el pasado mes de marzo, cuando se suspendieron los servicios que prestaban toda la noche durante los fines de semana y vísperas de festivos. Estos servicios estaban destinados específicamente al ocio nocturno y no llegaron a reanudarse una vez finalizado el anterior estado de alarma.
Las nuevas medidas aprobadas por la administración autonómica motivan esta decisión que también se ha adoptado después de que Tussam haya realizado un seguimiento del uso de estas líneas desde la aprobación de la limitación de movilidad a las 23.00 horas el pasado 25 de octubre. Los datos de este seguimiento constatan que el uso de estas líneas ha sido residual en este periodo y es previsible que descienda aún más con la suspensión de la actividad no esencial desde las 18.00 horas y el adelanto de la hora de limitación de la movilidad a las 22.00.
En paralelo a esta decisión, Tussam va a destinar los recursos de estas líneas que quedan temporalmente suspendidas a reforzar el resto de servicios, especialmente en horario de mañana. El resto de las líneas de Tussam no modifican, por el momento, sus horarios.
Del mismo modo, Tussam mantiene todas las medidas de prevención y seguridad que fueron acordadas hace diez días como el establecimiento del 50% del aforo para las plazas sentadas —con un asiento vacío entre pasajero y pasajero—y el 50% del aforo para las plazas autorizadas de pie o el uso obligatorio de mascarilla.