450 hectómetros cúbicos de agua para el regadío en esta campaña agrícola en el caso de que no caiga ni una sola gota en primavera. Esa es la garantía que ha ofrecido esta mañana la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir a los regantes en un escenario crítico por la sequía.
Y la previsión para las próximas semanas sigue siendo de tiempo anticiclónico y ni un solo atisbo de precipitaciones, por lo que en este contexto la cifra propuesta por la Confederación es un 48% menos de agua para riego que en la campaña del 2021, en la cual los regantes sufrieron una reducción de agua del 53%.
El máximo responsable de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, Joaquín Páez, también ha informado en la Comisión de Desembalses que se convocará en unas semanas la Comisión Permanente de Sequía y posteriormente otra Comisión de Desembalses.
Desde principios de otoño hasta nuestros días sólo ha habido tres momentos de precipitaciones abundantes. El acumulado es de 182 litros por metro cuadrado en la cuenca, lo cual es un 46% menos de agua que en 2021.