Un hombre ha sido condenado a 10 años de prisión por un delito de homicidio después de haber sido declarado culpable por un jurado popular por haber provocado el suicidio de un menor en Castellón.
La sentencia llega después de haber corroborado que el detenido le envió más de 119 mensajes a través de WhatsApp en tono amenazante en menos de 3 horas. Los hechos se produjeron el pasado 1 de diciembre de 2016, cuando la víctima apenas tenía 17 años.
El joven llegó a decirle que, si continuaba así, se acabaría suicidando. Pero los mensajes por parte del acusado no cesaron pese a ser consciente, según la sentencia, de "la angustia y el desasosiego y de la alta probabilidad de que se produjera la muerte del menor".
La tarde de ese mismo 1 de diciembre, el joven saltaría al vacío por un patio interior falleciendo en el acto.
La sentencia, además de los 10 años de prisión, fijó indemnizaciones a favor de los padres y del hermano del menor por un total de 173.000 euros por daños morales.