En lo que va de año la plantilla del Hospital Universitario Virgen de la Victoria ha sufrido 59 agresiones, pero los tres últimos meses la violencia se ha disparado. De junio a agosto, este es el centro andaluz que ha registrado el mayor número de agresiones, físicas y verbales, 17 en total.
Los celadores se ven impotentes, no tienen carritos ni camillas para pasar a los pacientes.Los profesionales van a trabajar con “miedo”, ha denunciado Concha Aragón, secretaria de la sección sindical de UGT, durante la segunda concentración, tras la época estival, que realiza la junta de personal del Hospital Clínico: “Si escuchan un porrazo o un grito ya se asustan, hay un poco de pánico”.
Una de las explicaciones de este ensañamiento en el Clínico es el “colapso en verano por el aumento de la población en la costa” y por la “falta” de personal y medios. Por ejemplo, cuenta, “los celadores se ven impotentes, no tienen carritos ni camillas para pasar a los pacientes”: “Imagínate que vienes con tu familiar y no tienen ni para ponértelo en un carrito, los tienen que tener esperando en la puerta hasta que se queda uno libre”.
Los medios “todavía no son los suficientes”, ha añadido Diego Villaespesa, delegado del SMM y los usuarios “se frustran y lo pagan con nosotros que no tenemos culpa”, ha reafirmado Juan Carlos Navas, secretario general de Sanidad de CCOO.
“Lo que queremos son medidas tangibles y dotación económica para aplicarlas”. Uno de los puntos clave para los sindicatos, ha dicho Navas, es el “refuerzo de la seguridad” que “no se ha hecho en este hospital, lo que se ha hecho es utilizar vigilantes de otros servicios para reforzar el área de urgencias. Lo que queremos es que haya más vigilantes y no desvestir a un santo para vestir a otro”.
Según datos de CCOO, en el 2022 las agresiones incrementaron un 43 por ciento.
La consejera de Salud, Catalina García, ha anunciado que se van a convocar las mesas contra las agresiones a sanitarios “para evitar que nuestros profesionales, los que nos cuidan desde que nacemos y hasta que morimos, tengan que sufrir una agresión”.
En cuanto a las críticas de los sindicatos por la lentitud en efectuar las medidas que se acordaron en la última mesa, la consejera ha pedido “paciencia” explicando que aplicar las “decisiones tiene un procedimiento”.
El representante del SMM ha dado un voto de confianza a la administración. “El movimiento se demuestra andando y vamos a ver cómo evoluciona”, ha indicado, aunque ha advertido que del resultado de las reuniones “dependerá que sigamos con las concentraciones”.
