El presidente del Levante, Pablo Sánchez, aseguró este martes, durante su discurso a los accionistas en el inicio de la junta general de la entidad, que el club tiene futuro y agradeció al consejero delegado, Pepe Danvila, “su enorme compromiso” y “su generosidad sin precedentes” tras haber invertido en la entidad 23 millones de euros.
“El Levante tiene futuro. Es una etapa especialmente ilusionante y liderada porque alguien que se está jugando su patrimonio personal”, dijo Sánchez en referencia a Danvila ante los accionistas en la junta celebrada este martes en València.
El presidente del Levante fue el primero en tomar la palabra en una junta clave y que debe ratificar el nuevo reparto de acciones, ya que la Fundación firmó un acuerdo con Danvila el pasado 14 de marzo por el que el actual consejero delegado adquiría el 37,5 por ciento de las acciones tras inyectar en el club 23 millones de euros.
La Fundación, que poseía hasta entonces el 60,3 por ciento de las acciones, mantiene por ahora otro 37,5 por ciento y en la junta de este martes debe apoyar a Danvila y a su nuevo consejo de administración, que incorporará a nuevos consejeros.
En su discurso de apertura, Pablo Sánchez destacó que en la etapa liderada por Danvila, que desde que en septiembre de 2023 se marchó de la presidencia Quico Catalán asumió la dirección del Levante, “se está extremando la profesionalización”.
“Quiero dar las gracias a Pepe Danvila por su enorme compromiso, su generosidad sin precedentes y porque ha incorporado a profesionales desde el altruismo más absoluto, que están regalando su conocimiento para levantar al club”, indicó el presidente del Levante.
Seis millones de pérdidas
La junta general de accionistas del Levante, celebrada este martes en Valencia, aprobó las cuentas del ejercicio económico 22-23 presentadas por el consejo de administración, con 6 millones de euros de pérdidas, y también dio el visto bueno al presupuesto previsto para el curso 23-24, con un beneficio de 267.000 euros.
Pese a que a la Fundación y el consejero delegado Pepe Danvila alcanzaron días atrás un acuerdo por el cual cada uno pasa a controlar el 37,5 por ciento de los títulos del club, este no será efectivo hasta un plazo máximo de dos meses, por lo que la junta aprobó todos los puntos del orden del día con el apoyo de la Fundación, que a día de hoy mantiene el 60 por ciento del accionariado del Levante.
La cita se celebró este martes, con varios meses de retraso, porque hasta el pasado 14 de marzo no se firmó el acuerdo entre la Fundación, máximo accionista del club, y el consejero delegado del Levante, Pepe Danvila, que ha inyectado 23 millones de euros en el club a través de distintas fórmulas y pasa a ser el accionista de referencia del Levante.
El club valenciano convocará en breve una junta de accionistas extraordinaria para formalizar el cambio accionarial y el traspaso de poderes entre la Fundación y Danvila.
El Levante sufrió una pérdida de hasta 40 millones por los ingresos de televisión y en el curso 22-23 apenas recibió 9 millones por este concepto, un 80 por ciento menos que la temporada anterior en Primera. El club compensó esta drástica reducción con la ayuda al descenso, de casi 19 millones de euros, y con la venta de jugadores cifrada en casi 14,2 millones de euros durante el ejercicio 22-23.
Además, la junta general también aprobó un presupuesto de poco más de 40 millones de euros para la presente temporada. Con un gasto en la plantilla de casi 12,9 millones de euros, la principal fuente de ingresos prevista es la venta de jugadores. El club tiene que vender por un valor de 18,4 millones, pero el pasado verano ya vendió por casi 14 millones con el traspaso de Cárdenas, Pubill, Pepelu o De Frutos.
El Levante presentó un presupuesto de ingresos de ordinarios de 16,7 millones y unos ingresos extraordinarios de 23,8. Con un presupuesto de gastos de 40 millones de euros, el saldo previsto para el final de ejercicio económico 23-24 es de 267.000 euros de beneficio.
La entidad valenciana, además, acumula una deuda de 107 millones de euros. De esa cifra global de más de cien millones, 85,3 son deuda a largo plazo y el resto corresponde a una deuda a corto plazo.
