La Conselleria de Educación de la Generalitat Valenciana ha decidido prohibir los dispositivos móviles en los centros no universitarios de la Comunitat Valenciana como norma general por entender que estos "pueden provocar dificultades en el aprendizaje y problemas de convivencia", por lo que el alumnado "deberá llevarlo apagado en la mochila".
Hasta ahora, cada centro educativo regulaba de manera autónoma el uso de los dispositivos móviles en las aulas; a partir de ahora, será una norma común para todos los centros de la Comunitat Valenciana, según ha anunciado en una rueda de prensa el conseller de Educación, Universidades y Empleo, José Antonio Rovira, quien ha precisado que las sanciones por incumplimiento sí que seguirán dependiendo de cada centro.
El conseller ha dicho que se trata de una medida de regulación tomada "mientras se trabaja en el decreto de convivencia" y que esta se combinará con "la educación digital": "a partir de ahora no se podrán utilizar a excepción de que sean necesarios para uso didáctico, siempre que se indique en la guía docente y bajo supervisión o por alguna razón específica autorizada por la dirección del centro".
Con esta decisión, desde la Conselleria se pretende que el alumnado "deje de estar pendiente de si le vibra o le suena el teléfono", ha asegurado el conseller.
En la rueda de prensa se ha aludido a los resultados de la evaluación del sistema educativo relacionados con el uso de nuevas tecnologías y la directora general de Innovación e Inclusión Educativa, María del Rosario Escrig, ha destacado que les ha "llamado la atención que el 8 % de los niños y niñas de tercero de Primaria utiliza el móvil más de 3 horas al día de manera lúdica".
Además, los resultados exponen que el 18 % del alumnado de sexto de Primaria utiliza más de 3 horas diarias el móvil para fines lúdicos, un 23 % en cuarto de la ESO, 17.7 % en segundo de Bachillerato y un 35 % los alumnos y alumnas de segundo de Formación Profesional Básica.
Por su parte, el responsable de la Oficina de Salud Mental y Adicciones de la Generalitat Valenciana, Bartolomé Pérez Gálvez, ha explicado que cada centro regulará el funcionamiento "en base a su contexto", por lo que el profesorado será quien regule la retirada del móvil o la sanción, según el caso, algo que, según el conseller, "reforzará la autoridad de los docentes en el aula".
Los responsables han resaltado la importancia de la formación en "sensibilización" a los docentes y familias frente al ciberacoso.