Actualmente la factoría produce unas 800 toneladas de langostino cocido además de la producción de otras muchas variedades, tales como pulpo cocido, gambón, langosta, y otros crustaceos muy apreciados por el consumidor, y últimamente han comenzado con la fabricación de preparado para platos que han comenzado a trabajar.
Las dos nuevas factorías incorporan las últimas novedades en maquinaria industrial aplicada al sector de la alimentación. Las instalaciones se distribuyen en torno a un conjunto de cámaras frigoríficas, cocederos, salas de embalaje, almacén, puntos de venta, oficinas y despachos, cámaras de descongelación etc.
Manuel Alcaide, Juan Miguel Alcaide y Ana Ávila, propietarios de la factoría explicaron que "gran parte de la producción está dirigida al mercado nacional: Cataluña, Madrid y Valencia, principalmente", además de Andalucía, naturalmente.
La ampliación y mejora de la factoría de Apolo ha contado con el apoyo de la Junta de Andalucía que financiado el 35% de la inversión. Actualmente Congelados Apolo da trabajo a unas 70 personas. A punto de iniciar la campaña de Navidad, Alcaide confía en aumentar la plantilla en unas 20 personas más. "Es una campaña atípica por la crisis actual y no sabemos si se van a resentir las ventas".
Y es que Apolo figura entre los ocho mejores cocederos de España. Una de las razones de su éxito es que la empresa cuenta con una completa red de importación que acerca la materia prima desde China, Vietnam, Sudamérica y Argentina.
En total, la factoría importa 2 millones de kilos aparte del producto nacional. Concretamente en Argentina cuenta con un barco pesquero de gran tonelaje que extrae gambón y langostino durante todo el año para la factoria lojeña. Una vez en esta planta del Manzanil el producto se elabora para ser comercializado siguiendo unos estrictos controles de calidad, seguridad alimentaria y trazabilidad.
Desde Congelados Apolo sostienen que la percepción del consumidor con respecto a los productos congelados es cada vez mejor, ya que los tratamientos de ultra congelación en alta mar, como en el transporte o en los barcos pesqueros permite mantener todas las propiedades de estos productos cuando llegan a los hogares.
Durante la inauguración de la nueva factoría, el delegado provincial de Agricultura en Granada, Andrés Ruiz y el alcalde de Loja, Miguel Castellano coincidieron en destacar la pujanza de las pequeñas y medianas empresas lojeñas. "No en vano, Loja contará con el primer parque agroalimentario de la provincia", comentaron alcalde y delegado.