El primer caso detectado de coronavirus en el norte de California, que eleva hasta siete el total de personas infectadas en Estados Unidos, fue anunciado este viernes por las autoridades sanitarias locales.
Se trata de un vecino del condado de Santa Clara que viajó recientemente a la la ciudad china de Wuhan, el principal foco del brote de coronavirus.
Según las fuentes, el paciente no ha dado señales de encontrarse "demasiado enfermo", pero por precaución se le ha mantenido aislado en su casa desde que regresó de su viaje el 24 de enero y se ha evitado que tenga contacto físico con prácticamente nadie.
Esta nueva confirmación tiene lugar un día después de que el jueves las autoridades sanitarias de Estados Unidos confirmasen que se había producido el primer caso de contagio local de coronavirus en su país.
Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de California indicaron que se trata de una persona que vivía con una mujer de Chicago y que había viajado a Wuhan, epicentro del brote de esta enfermedad, que ya ha afectado a casi 10.000 personas y causado 213 muertos, según cifras del Gobierno de Pekín.
Además de los dos casos confirmados en Chicago, en Estados Unidos se han registrado otros dos en la zona metropolitana de Los Ángeles (California), el de Santa Clara, uno en Arizona y otro más en Seattle, en el estado de Washington.
Estados Unidos anunció igualmente este viernes que prohibirá temporalmente el ingreso al país de los extranjeros que hayan visitado China en los últimos 14 días para evitar la propagación del coronavirus, porque representa una "emergencia de salud pública".
La medida para impedir la entrada de visitantes estará vigente a partir del próximo domingo, 2 de febrero, explicó el secretario de Salud y Servicios Humanos de EE.UU., Alex Azar, en una conferencia de prensa.
La decisión prevé igualmente que se someterá a una cuarentena obligatoria de 14 días a los estadounidenses que hayan visitado la provincia de Hubei, cuya capital es Wuhan.