A la chita callando, el espigado atacante de Alcoy está ofreciendo unos números que más de un delantero en Primera firmaría a comienzos del campeonato.
Su explosión goleadora en comunión con los minutos de los que está disfrutando es realmente llamativa. La intención del futbolista y del club ante tal tesitura, es de llegar a un acuerdo para que ambos se beneficien mutuamente ampliando la vinculación contractual de Molina que finaliza en junio de 2014.
El jugador ya ha mostrado su deseo de continuar: "Estoy muy cómodo y a gusto en Sevilla pero primero quiero acabar bien el año”, declaró ayer en Radio Sevilla.