A pesar de las últimas lluvias, las reservas de agua de la provincia siguen estando en niveles preocupantes. Los ocho embalses de la Demarcación Hidrógráfica del Tinto, Odiel, Piedras y Chanza se ecuentran al 47,83% de su capcidad, según los datos de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía a fecha de 22 de noviembre.
La falta de precipitaciones de los últimos meses ha provocado que la provincia haya perdido un 32,91% del agua que acumulaba hace justo un año en dichas cuencas.
En concreto, los registros de la Consejería recuerdan que estos ocho embalses onubenses recogían un total de 815,20 hectómetros cúbicos de agua en noviembre de 2018 mientras que doce meses después el volumen acumulado es de tan solo 546,87 hectómetros.
Los últimos meses han sido especialmente negros para la acumulación de agua en tierras onubenses. Los últimos datos del Índice de Precipitación Estandarizado (SPI) que elabora el Ministerio para la Transición Ecológica, correspondientes a octubre, se sitúan entre -2 y -3 puntos en una escala de seis meses en Huelva. Este indicador -que la Agencia Estatal de Meteorología controla como elemento de vigilancia de la sequía- muestra que en seis meses ha llovido en Huelva entre dos y tres veces menos que la media histórica para estas fechas.
A pesar de estos datos, el delegado territorial de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, Álvaro Burgos, hace un llamamiento a la tranquilidad. “Es cierto que la situación, teniendo en cuenta el histórico de lluvias de los últimos años, genera preocupación, pero se trata de una situación controlada, el sistema resiste y aunque no lloviera nada tendríamos agua para dos años”, asegura Burgos a Viva Huelva.
Las últimas lluvias caídas, explica Burgos, no han provocado grandes cambios en la situación de los embalses ya que es necesario que caigan “entre 180 y 200 litros por metro cuadrado de agua para que empiecen las correntías y se acumule el agua”. Sin embargo, añade, si se cumplen previsiones metereológicas la situación podrá mejorar en las próximas semanas con lluvias más abundantes y continuas.
En cualquier caso, sostiene Burgos, la Junta está trabajando para seguir mejorando el sistema hidrológico, fundamentalmente, para lograr un “aumento de la regulación y la mejora de la capacidad de transporte”.
Burgos remarca que para avanzar en este objetivo es “muy importante” apostar por el Pacto del Agua y tener “una comunicación fluida con el Ministerio no solo para exigir que se ejecuten obras del Estado como la Ley del Trasvase sino para colaborar para que las infraestructuras que necesita Huelva se ejecuten lo antes posible”.
Es cierto, admite Burgos, que hay zonas de Huelva que necesitan una mayor premura a la hora de tomar medidas hidrológicas. Entre ellas cita la dependiente del embalse de Corumbel Bajo, que está al 20,48% de su capacidad.
Para “abordar lo antes posible” la situación en las que áreas más afectadas, donde se han tenido que decretar ya ciertas restricciones, la Junta, informa el delegado autonómico, está trabajando con Mas y Giahsa. “Nuestro departamento técnico está trabajando en cada uno de los territorios para abordar las soluciones necesarias”, explica el delegado. Esas soluciones pasan, más a medio plazo, por la construcción de nuevas infraestructuras hidrológicas.
A pesar de la mala racha climatológica, Huelva sigue siendo una de la provincias andaluzas mejor cubiertas ante la sequía. De hecho, según el último balance de la Junta, la onubense es la tercera provincia andaluza en porcentaje de llenado de sus embalses y la cuarta en el volumen total de agua acumulada. Son Córdoba (949 hectometros cúbicos), Cádiz (820,52) y Jaen (749,97) las provincias que cuentan con mayores reservas.
Para garantizar el acceso al agua de todos, insiste Burgos, es “vital” el Pacto del Agua porque “el agua no puede ser un elemento de confrontación”.
