Ramírez quiso recordar ayer al alcalde, Tomás Herrera, que los partidos en el Gobierno municipal prometieron en su programa electoral la regeneración y aprovechamiento del antiguo asilo, y que, sin embargo, “hoy continúa en un escandaloso abandono”.
El concejal popular aseguraba ayer que el conjunto ha sido “dejado a su suerte”, y que sus instalaciones “sufren de falta de atención en su cobertura, por lo cual no se ha impedido la acción de las aguas de lluvia, presentando un lamentable estado tanto a la vista exterior de su fachada como a la estructura interior”.
El edil entiende que esta situación no es exclusiva del asilo, y que las condiciones que han ido propiciando su deterioro podrían estar afectando también a la seguridad de las instalaciones de la coordinadora contra la droga Barrio Vivo, situada junto al asilo.
Pero la situación más “sangrante” para Ramírez es “la falta de protección y el abandono en de la capilla del asilo San José, obra valiosísima del neogótico, tanto por su valor sentimental como por su valor artístico, siendo una de las señas de identidad de nuestra ciudad, donde muchas personas unieron sus vidas en matrimonio o asistieron a el último día de sus seres queridos”.