Varios trabajadores de un supermercado Charter de Picanya, una de las localidades fuertemente afectadas por la dana que ha asolado la provincia de Valencia, han pasado la noche haciendo guardia en la puerta del local para evitar los saqueos que se estaban empezando a producir.
Así lo relata a EFE Carla, responsable de este establecimiento, que recuerda que varias trabajadoras han tenido que quedarse en casa de una compañera, al intensificarse las lluvias y no poder volver a sus domicilios.
Señala que la pasada noche, estando en casa de esa compañera, escucharon la persiana del supermercado y tuvieron que acercarse al local para echar a la gente que la había "reventado" y habían roto los cristales para acceder al interior.
"Tuvimos que venir, echar a la gente y desde entonces hemos tenido que estar pendientes de la puerta" y hacer guardia toda la noche, explica.
Para ello, acercaron su coche, que estaba operativo, a la puerta de entrada "para hacer una barrera física para la gente"; fueron cogiendo sillas y una mesa que encontraron, y así han pasado la noche tres o cuatro compañeros haciendo turnos y amenizando las horas como podían.