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Atando Cabos

Sanidad pública a su suerte

Vayamos más allá de los aplausos y apoyemos la sanidad pública, no dejemos que la desmantelen para buscarla luego en las crisis

Publicado: 13/05/2020 ·
13:41
· Actualizado: 13/05/2020 · 13:41
Autor

Remedios Jiménez

Licenciada en Historia, docente y verso suelto

Atando Cabos

Una mirada sobre lo que nos pasa día a día, bajo los titulares de la incesante actualidad

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El lunes veíamos repartir mascarillas FFP2 a toda la población madrileña, cuando los sanitarios carecen de ellas. Tienen que solicitar la empatía a sus conciudadanos para que se las donen. Como si no se hubieran jugado la vida por ellos. No sé yo si se repite otra crisis, si vamos a tener una respuesta igual por parte de los sanitarios, después de cómo los estamos tratando.

La sanidad pública se ha portado gracias a la solidaridad de quienes la ejercen. El único reconocimiento que han cosechado es el aplauso ciudadano. Se merecen más, mucho más. Para empezar, carecen de medidas de protección adecuadas.  Piensen en el futuro, si vuelve a suceder. ¿Van a trabajar tantos meses después, jugándose el tipo de nuevo?

Aquí, en Andalucía, se retorna a los viejos hábitos: contratos en precario, cierres por la tarde, no cobertura de vacaciones, cierre de plantas, etc. Todo eso después de una crisis sanitaria que ha paralizado la atención ordinaria, retrasando listas de espera. Todo el esfuerzo realizado para que quien reciba el espaldarazo sea la sanidad privada.

Se pone una prueba de fuego a los profesionales públicos para que, quien acabe sacando tajada, sea la medicina privada. Quién tiene un problema de salud y no es atendido pone su bolsillo por detrás. Así que, en los próximos meses veremos como el negocio sanitario se pone a rodar a toda velocidad, mientras la sanidad pública, la que responde en las emergencias se ve nuevamente perjudicada. Dejada en manos de gestores y no de profesionales de la salud que todo lo que ahorran es para aportarlo a sus propios sueldos. Son ellos los que deciden la calidad que vamos a encontrar al hacer uso de los servicios. No ignoremos ésto cuando encontramos lo que encontramos y no lo que esperamos.

La pandemia viene acompañada de una grave situación económica, muchas personas están sin empleo y no podrán permitirse más sanidad que la pública, habrá que defenderla.

Antes de los recortes teníamos una sanidad pública estupenda que sufrió un deterioro importante. Ahora la ponemos a prueba sólo para terminar abandonándola a su suerte.

Dejemos de hacer como los monos de Gibraltar, tapándonos los ojos para no mirar. Vayamos más allá de los aplausos y apoyemos la sanidad pública, no dejemos que la desmantelen para buscarla luego en las crisis.

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