Unas muñecas muy gaditanas son las que vuelven a sonar el 2x4 más infantil e ingenuo del Concurso sin lugar a dudas. Fiel a su tipo le cantan a las dificultades que entraña el mundo en el que prefiere no salir de su cuarto ante el miedo que da éste.
En el segundo tango se lo brindan a los que le dieron su vida, a los que también participan en el Carnaval, a los padres de éstas que también se suben y lo hacen sobre las tablas.
Buena letra y mejores sentimientos sinceros de estas coristas. El buen gusto lo cierran con un popurrí animoso y alegre.